Pasajeros de la línea 153 pasaron un susto grande cuando viajaban hacia el centro de la ciudad y vieron como un gran ventanal de la unidad se desplomaba contra la calle. Si bien en un principio se especuló con que podría haber sido un ataque, luego constataron que la mampara se había desprendido sola.

Así quedó el colectivo sin el ventanal.

“Estaba lo más bien y de la nada se cayó la mampara completa. Gracias a dios no había gente”, resumió a Rosario3 una pasajera de la unidad. El desprendimiento se dio en pleno recorrido de la unidad cuando pasaba por barrio Rucci. De hecho, la testigo contó que fueron ellos los que le avisaron al chofer lo que había ocurrido para que frenara.

La unidad quedó detenida en la esquina de Gambartes y Tabaré por lo que los pasajeros tuvieron que esperar el arribo de otro colectivo para poder continuar con su recorrido. “Me terminé tomando el 102 porque en la aplicación de Movi me decía que no había ningún 153 cerca”, lamentó la pasajera.