Con la proliferación de Uber, una plataforma de viajes que sigue siendo ilegal en Rosario, escalar el conflicto entre taxistas y choferes informales. Este jueves hubo dos situaciones de mucha tensión: taxistas frenaron a un supuesto motociclista Uber que llevaba una pasajera por el centro y, como si fueran agentes de control, le exigieron papeles a un automovilista que estaba estacionado frente a uno de los shoppings.

La primera de las escenas comenzó en la zona de 3 de Febrero y España . En la filmación, que hizo el propio taxista mientras manejaba, se ve a un hombre y una mujer a bordo de una moto. A lo largo de la persecución, el conductor del taxi insulta y hostiga a la pasajera.

La siguiente escena filmada de esta situación es con la moto frenada, el casco de la pasajera en el piso y el motociclista apagando el vehículo mientras que otro conductor de un taxi, que dejó el auto en doble fila, lo insultaba por ofrecer ese servicio ilegal.

Pasadas las 21 quedó registrada otra situación de gravedad. En la filmación se ve a un grupo de taxistas exigiéndole a un automovilista particular, que estaba frenado en la puerta del Alto Rosario, que muestre documentación que certifique que no estaba trabajando como Uber.

Este segundo episodio no pasó a mayores porque el conductor logró demostrar que era bicicletero y que estaba esperando a un familiar que había ido al shopping. Pero además, porque acudió al lugar un importante número de policías y de agentes de Control y Convivencia para mediar.

Consultados por estos dos episodios, desde el municipio reconocieron a Rosario3 que antes de hacerse presentes en el Alto Rosario para bajar la tensión, trabajaron en la estación Rosario Norte donde se dio una situación similar entre taxistas y conductores de Uber.