Un iceberg de 1.270 kilómetros cuadrados se desprendió de la plataforma Brunt en la Antártida gracias al crecimiento de una basta grieta de hielo, informó la British Antarctic Survey (BAS), cuya estación de investigación se encuentra en la zona. Este hecho ocurre luego de casi una década de que se identificara el crecimiento de las gritas en la Antártida por primera vez.

El iceberg, detallaron, es equivalente al condado de Bedfordshire, Reino Unido, y su tamaño supera la superficie de la ciudad de Nueva York en los Estados Unidos. Los investigadores esperaban que se partiera desde noviembre del 2020, cuando los primeros indicios de grietas fueron descubiertos. En aquel entonces, el equipo de 12 personas que trabajan en la estación registró que la sima North Rift se dirigía a otra gran fisura cerca de Stancomb-Wills Glacier Tongue a 35 km de distancia.

En enero del 2021 la grieta comenzó a crecer con una velocidad de un kilómetro por día hasta que partió la plataforma de hielo flotante de 150 metros de espesor. La mañana del 26 de febrero, la grieta se extendió varios kilómetros y liberó el enorme trozo de hielo en tan solo unas horas.

La profesora Dame Jane Francis, directora de BAS, comentó que el iceberg de la plataforma Brunt fue monitoreado durante años con una red automatizada de instrumentos GPS de alta precisión alrededor de la estación, los cuales se encargan de medir como se mueve y deforma la plataforma.


Además se usan imágenes satelitales de la Agencia Espacial Europea (ESA), la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) y el el satélite alemán TerraSAR-X para recabar datos que se envían a Cambrige para conocer su condición, incluso cuando no hay personal por el invierno antártico con temperatura por debajo de los -50 grados.

“En las próximas semanas o meses, el iceberg puede alejarse; o podría encallar y permanecer cerca de Brunt Ice Shelf”, detalló la directora, pero si su movimiento pone en peligro la estación investigadores, los sistemas de GPS enviarán una alerta a los investigadores

Aunque el iceberg se encuentra cerca de la estación de BAS, los investigadores aseguran que es poco probable que esta se vea afectada por la partición de los últimos días. De hecho, la estación se encuentra cerrada por el invierno antártico.