Tras más de una década de investigaciones, científicos del hospital de Massachusetts y la Universidad de Harvard descubrieron una sustancia capaz de penetrar en la piel y broncearla, sin exponerla a los rayos ultravioletas del sol. De esta forma se evita el riesgo de desarrollar cáncer cutáneo.

Se trata de una diferencia fundamental respecto a las cremas autobronceantes tradicionales que únicamente colorean la capa superficial de la piel, estimulando una molécula que absorbe las radiaciones UV.

De acuerdo a un estudio publicado por la revista Cell Reports y reproducido por la agencia AFP, el descubrimiento se basa en una molécula que puede aplicarse como una crema. Ya fue probada en ratones de pelo rojo, que al igual que los humanos son susceptibles a desarrollar cáncer de piel.

Como la piel es un muro casi infranqueable, debieron trabajar en partículas mucho más pequeñas, capaces de atravesar lípidos para actuar sobre enzimas, que a su vez, actúan sobre el mismo mecanismo genético de pigmentación de la piel.

Tras las pruebas en muestras de piel humana en laboratorio, se constató que broncean más o menos en función de las dosis de la sustancia y la frecuencia de las aplicaciones, y que este bronceado artificial dura varios días.

“La importancia potencial de este estudio residirá en el futuro en una nueva estrategia de protección de la piel y de prevención del cáncer cutáneo”, aseguraron los expertos.