Desde hace una semana, el valor de algunos productos como las tapas de los tanques de agua, los parabrisas de los vehículos y los vidrios en general se disparó hasta alcanzar en algunos casos el ciento por ciento de su precio original.
Algunos comerciantes justifican los aumentos diciendo que cuando repusieron stock, los precios ya estaban cambiados, inclusive para ellos. Pero lo cierto es que algunos vendedores no conformes con las ganancias extras que la catástrofe le permite cosechar, remarcaron de manera exagerada.
Desde este martes, la Subsecretaría de Defensa del Consumidor de la Nación realiza inspecciones en la ciudad para detectar los abusos denunciados y su titular, José Luis López dijo a Radio 2 que para que ellos puedan actuar “es imprescindible que los consumidores pidan y conserven la factura correspondiente a cada producto comprado y a cada trabajo de mano de obra contratado”.
Las inspecciones se hacen en forma comparativa, exigiendo las facturas de compra de cada comerciante a su mayorista desde hace un mes hasta la fecha. También constatan los precios cobrados en las facturas de un mes atrás y los comparan con los que se cobran en la actualidad.
Otro criterio para demostrar el probable abuso en la marcación de precios, consiste en comparar los valores de Rosario, con negocios del mismo rubro ubicadas en las ciudades de Santa Fe, Córdoba, Capital Federal y otras ciudades vecinas.
De acuerdo a lo estimado por López, la semana próxima se conocerán los resultados de las inspecciones y se publicarán los nombres de los comercios que sobrefacturaron los productos y servicios. “A ellos se los sancionará con multas que van desde los 200 pesos hasta los 500 mil pesos, según el tamaño de la empresa y el monto facturado, pero no habrá resarcimiento económico para el consumidor estafado", advirtió el funcionario.
El proyecto que establece la compensación monetaria al comprador recién tiene media sanción de la Cámara de Diputados de la Nación y aún resta su aprobación por parte del Senado para que se convierta en ley.
Algunos comerciantes justifican los aumentos diciendo que cuando repusieron stock, los precios ya estaban cambiados, inclusive para ellos. Pero lo cierto es que algunos vendedores no conformes con las ganancias extras que la catástrofe le permite cosechar, remarcaron de manera exagerada.
Desde este martes, la Subsecretaría de Defensa del Consumidor de la Nación realiza inspecciones en la ciudad para detectar los abusos denunciados y su titular, José Luis López dijo a Radio 2 que para que ellos puedan actuar “es imprescindible que los consumidores pidan y conserven la factura correspondiente a cada producto comprado y a cada trabajo de mano de obra contratado”.
Las inspecciones se hacen en forma comparativa, exigiendo las facturas de compra de cada comerciante a su mayorista desde hace un mes hasta la fecha. También constatan los precios cobrados en las facturas de un mes atrás y los comparan con los que se cobran en la actualidad.
Otro criterio para demostrar el probable abuso en la marcación de precios, consiste en comparar los valores de Rosario, con negocios del mismo rubro ubicadas en las ciudades de Santa Fe, Córdoba, Capital Federal y otras ciudades vecinas.
De acuerdo a lo estimado por López, la semana próxima se conocerán los resultados de las inspecciones y se publicarán los nombres de los comercios que sobrefacturaron los productos y servicios. “A ellos se los sancionará con multas que van desde los 200 pesos hasta los 500 mil pesos, según el tamaño de la empresa y el monto facturado, pero no habrá resarcimiento económico para el consumidor estafado", advirtió el funcionario.
El proyecto que establece la compensación monetaria al comprador recién tiene media sanción de la Cámara de Diputados de la Nación y aún resta su aprobación por parte del Senado para que se convierta en ley.
