El detenido ex secretario de Obras Públicas, José López, aseguró este jueves que el dinero con el que fue detenido en un convento de General Rodríguez "pertenecía a la política" y prometió dar más precisiones al respecto cuando recupere su "fortaleza física".

Aunque no quiso responder preguntas en relación al origen del dinero y al destino que pensaba darle, el ex funcionario reconoció que lo tenía oculto en su casa del Tigre y aseguró que nadie, ni su mujer María Amalía Díaz ni las religiosas del convento, sabían de su existencia.

"Lo que voy a decir por ahora con respecto a ese dinero, es que ese dinero no me pertenecía, ese dinero pertenecía a la política. Y yo, cuando tenga la fortaleza física, psicológica y espiritual necesaria, voy a dar todos los detalles", sostuvo el ex funcionario durante su segunda declaración ante el juez Daniel Rafecas.

El dinero, según su relato, lo tenía oculto en un "lugar inaccesible" del que "nadie sabía": debajo de un falso piso armado en el lugar donde está ubicado el tanque de agua al que solo se puede llegar a través de una ventana de su habitación.

López llegó a los tribunales federales de Comodoro Py pasadas las 8.30, fue subido al juzgado de Rafecas a las 12 y minutos después comenzó con su declaración indagatoria que, para sorpresa de los funcionarios judiciales, se extendió por más de tres horas.

Durante su presentación ante el juez y ante funcionarios de la fiscalía que encabeza Federico Delgado, López se mostró "colaborativo" a punto tal que cuando le dijeron que no habían podido desbloquear su celular marca IPhone dictó su clave sin titubear, según informaron fuentes judiciales.

“En primer lugar quería decir que estaba muy ansioso para estar frente a al juez en este momento. No como la primera vez, en la que estaba fuera de mí, no estaba en mi sano juicio", fueron las primeras palabras que pronunció el imputado, quien estuvo acompañado por si abogado Fernando García.

Para su segunda declaración en la causa -en la primera se había negado a declarar- Lopez vestía un traje y se lo vio con barba candado, algo diferente a las imágenes del ex funcionario que se conocieron tras su detención en la madrugada del 14 de abril pasado, cuando intentó esconder bolsos con 9 millones de dólares en un monasterio de General Rodríguez.