En una entrevista concedida a la página web de la FIFA, el Diez admitió: "Es duro. Me divertía mucho más como jugador, pero no le pierdo la cara a la responsabilidad. Me han pasado cosas muy feas en mi vida, me reinventé y hoy estoy al frente de la selección argentina. ¡Es un sueño!".
A nueve meses de asumir en el puesto, Maradona confió que sólo logró "tener a los muchachos" por espacio de "un mes y medio". Y evaluó: "Es muy poco lo que se tiene para trabajar y estar con ellos. Mi llegada fue buena, pero ahora hay que meter conceptos en esas 25 cabecitas: qué tienen que hacer adentro y afuera de la cancha. Yo ya la pasé, y por eso vuelco mi experiencia a disposición del plantel".
Y continuó: "Es injusto que esperen ver el estilo Maradona cuando tengo a los muchachos un par de días antes de cada partido. Uno se arregla con lo que tiene, hace y deshace en tres días. Los jugadores llegan de un viaje largo y necesitan relajarse y estirar las piernas, por lo que no se puede trabajar mucho antes del partido". Planteó que "hay que estar continuamente hablando por teléfono, sabiendo cómo están los jugadores. Es mucho más de logística que estar viéndolos".
"No les puedo meter un doble turno, ¡los reventaría! Les voy inculcando lo que quiero, pero poco a poco. Más que director técnico, soy un seleccionador", subrayó el DT.
Maradona contó que ve partidos de fútbol todo el tiempo. Y analizó sobre el campeonato europeo: "Los equipos están como están: el Milan anda muy bajo, el Inter sigue manteniendo su nivel. El Madrid creo que va a cambiar mucho con Kaká, le va a dar desequilibrio. Lo que no entiendo es por qué no juega Gago. Deberían ponerlo, aunque sigue estando en mi preferencia", opinó.
"De los nuestros veo bien a (Diego) Milito, me demostró que está en gran nivel. Y el Kun (Sergio Agüero) también. A Messi traté de llamarlo, pero es más fácil hablar con Obama que con Leo. Me contaron que está haciendo una buena pretemporada. En ese aspecto estamos tranquilos", explicó.
