La ex ministra de Estrategia y Comunicaciones de Honduras Hilda Hernández, hermana del presidente del país, Juan Orlando Hernández, murió en un accidente de helicóptero, en el que también perdieron la vida otras cinco personas, informaron medios locales.

El aparato de la Fuerza Aérea, que había sido reportado como desaparecido el sábado a la mañana, fue hallado en el sector de la montaña de Yerbabuena, cercana a Tegucigalpa, región central del país, según reprodujo la agencia de noticias EFE.

Los otro cinco tripulantes eran la capitán de Infantería Patricia Valladares; los miembros de seguridad Nahun Lagos y Marcos Banegas; el teniente de aviación Iván Vásquez y el subteniente Gerson Díaz, según había informado previamente la Fuerza Aérea de Honduras (FAH) en un comunicado.

El mal tiempo en la región central del país centroamericano habría sido causa del accidente del helicóptero, que según una fuente de la FAH era nuevo, tenía pocas horas de vuelo y era una de las aeronaves incautadas al narcotráfico.

La aeronave, un Ecuriel AS350 B3, despegó esta mañana de la Base Aérea Hernán Acosta Mejía, de Tegucigalpa, pero nunca llegó a Comayagua, la ciudad destino, situada en el central departamento homónimo.

Hilda Hernández había dejado su cargo de ministra en enero pasado para trabajar como asesora en la campaña para la reelección de su hermano, el mandatario hondureño, de cara a las elecciones generales del pasado 26 de noviembre.

Actualmente, Honduras vive una grave crisis política, luego de que los dos principales candidatos, el presidente Hernández y el opositor Salvador Nasralla, se declararan electos la misma noche de las elecciones antes de conocerse los resultados definitivos.

El conteo finalizó ocho días más tarde, plagado de dudas, reclamos y manifestaciones de opositores y oficialistas, luego de una semana sin resultados, con una ventaja de 1,6 puntos en favor de Hernández.

En Honduras, no hay segunda vuelta y el candidato presidencial que obtiene más votos se queda con el triunfo.

Sin embargo, ante las denuncias de fraude de la oposición, avaladas por los observadores internacionales, el Tribunal Supremo Electoral debe ahora resolver las más de 150 impugnaciones presentadas y proclamar a más tardar el 26 de diciembre al nuevo presidente electo, así como a los nuevos diputados y alcaldes.