Miles de personas salieron a las calles de las principales ciudades de Indonesia para protestar contra la visita oficial del presidente estadounidense, George W. Bush.

El gobierno reforzó la seguridad de la embajada estadounidense en Yakarta y desplegó 27.000 agentes de seguridad en la ciudad y en Bogor, a 55 kilómetros al sur de la capital, donde Bush se entrevistará esta tarde con su homólogo indonesio, Susilo Bambang Yudhoyono.

La visita de Bush provocó fuerte oposición entre los grupos musulmanes indonesios, contrarios a la política internacional de EE.UU., que califican de "anti-islámica".

Habib Assegaf, presidente de la Alianza de Organizaciones Musulmanas Unidas, aseguró a la agencia estatal de noticias "Antara" que espera que al menos 30 mil personas participen en las protestas convocadas hoy en Bogor, donde ya han llegado miles de manifestantes.

Las calles centrales de Bogor han sido cerradas al tráfico y se han instalado alambradas a lo largo de las carreteras que rodean el Jardín Botánico, donde aterrizará el presidente estadounidense.

La seguridad también ha sido reforzada en la base aérea de Halim Perdanakusuma, en el este de Yakarta, donde aterrizará el avión presidencial bajo la estrecha vigilancia de dos helicópteros "Black Hawk Sikorsky" de la Fuerza Aérea estadounidense.

Yudhoyono ha solicitado a la población que no proteste "de forma excesiva" y ha advertido que cualquier incidente durante la corta visita tendría graves repercusiones.

Las protestas, que se iniciaron a principios de este mes, han ido ganando intensidad según se acercaba la fecha de la visita y el domingo cientos de manifestantes en Yakarta calificaron a Bush de "asesino" y "criminal de guerra".

Fuente: EFE