Un hombre de 45 años se encuentra internado en el hospital Centenario tras haber recibido un disparo en la cabeza.
Según manifestaron fuentes policiales, José María Villarruel, llegó a su domicilio ubicado en Calle 12 al 2300, de la localidad de Granadero Baigorria, en estado de ebriedad y por tal motivo rápidamente se fue a acostar.
Después que Villarruel retornó a su casa, su mujer salió a hacer unas compras y cuando regresó vio que su esposo no se levantaba y se acercó al dormitorio. Ahí, vio que su pareja tenía una herida en la cabeza que sangraba.
Las pericias médicas indicaron que Villarruel presentaba un orificio de entrada y salida en el cráneo a raíz de una herida de bala. Por tanto, la víctima fue trasladada primero al hospital Eva Perón y luego al Centenario donde se encuentra asistido por un respirador.
La mujer de Villarruel, de 39 años, declaró que su esposo había llegado en un Renault 12 color naranja acompañado con una persona que ella desconocía y a la que nunca antes había visto. En este sentido, la esposa de la víctima manifestó al personal policial que no descarta que la agresión se deba a un ajuste de cuentas aunque no apuntó a ningún responsable.
Según manifestaron fuentes policiales, José María Villarruel, llegó a su domicilio ubicado en Calle 12 al 2300, de la localidad de Granadero Baigorria, en estado de ebriedad y por tal motivo rápidamente se fue a acostar.
Después que Villarruel retornó a su casa, su mujer salió a hacer unas compras y cuando regresó vio que su esposo no se levantaba y se acercó al dormitorio. Ahí, vio que su pareja tenía una herida en la cabeza que sangraba.
Las pericias médicas indicaron que Villarruel presentaba un orificio de entrada y salida en el cráneo a raíz de una herida de bala. Por tanto, la víctima fue trasladada primero al hospital Eva Perón y luego al Centenario donde se encuentra asistido por un respirador.
La mujer de Villarruel, de 39 años, declaró que su esposo había llegado en un Renault 12 color naranja acompañado con una persona que ella desconocía y a la que nunca antes había visto. En este sentido, la esposa de la víctima manifestó al personal policial que no descarta que la agresión se deba a un ajuste de cuentas aunque no apuntó a ningún responsable.
