El momento previo a la llegada del tsunami a la ciudad indonesia de Palu el pasado 28 de septiembre fue desesperante. Y un hombre transmitió el aviso con angustia: quería alertar a todo el mundo de la inminente llegada de las olas.

El usuario de Twitter, que observaba el mar desde un puente cerca de la playa, se percató de las enormes olas que se acercaban mientras grababa con su teléfono. De inmediato, comenzó a advertir en voz alta a todos los transeúntes y a indicar con su mano del peligro inminente que venía.

Mientras tanto, el agua invadía rápidamente la zona costera, arrastrando consigo decenas de casas y todo lo que encontraba a su paso. En cuestión de segundos el paisaje se convirtió en una marea de agua sucia y escombros. La voz entrecortada revela la desesperación y el pánico del momento.

El viernes, un potente terremoto de magnitud 7,5 azotó la isla indonesia de Célebes. En total más de 170 sismos sacudieron la zona. Los temblores desencadenaron un tsunami que afectó especialmente Palu, capital de la provincia de Célebes Central, y Donggala, causando una gran destrucción y un gran número de víctimas mortales que puede estimarse en millares.