La producción argentina El Reino es la miniserie del momento. Emitida por Netflix, a la gran respuesta del público se le sumó la controversia que generó la resistencia del movimiento evangelista que acusó a sus creadores y escritores de discriminar y tergiversar su fe. La polémica se extendió rápidamente y el debate se volcó en las redes sociales.

En diálogo con Roberto Caferra (Radiópolis, Radio 2); el director y escritor de El Reino –protagonizada por Diego Peretti, Mercedes Morán, Chino Darín, Joaquín Furriel, Peter Lanzani y Nancy Dupláa, Marcelo Piñeyro–, celebró su estreno simultáneo en 190 países. “Ha arrancado muy bien, nos está yendo muy bien en varios países, es discutida y debatida y es lo que uno desea, intentamos plantear una reflexión con lo que pase en el mundo, entonces que dispare debates y reflexiones es maravilloso”, consideró.

El director advirtió que a pesar de que es muy vista en distintos países, “las miradas son diferentes, pero que interese y suceda esto en el público es esperable. “En mi mejor fantasía no llegaba a esto que está pasando”, destacó. Y advirtió: “He hecho muchas películas con éxito y Claudia es la escritora más traducida en este momento, pero conocemos un éxito que es más lento”.

Para Piñeyro, la hisotoria que se cuenta a lo largo de los 8 capítulos “es verosímil, sin dudas”, aunque remarcó que no es literal. En relación a los planteos esgrimidos desde el evangelismo, quiso relatar la génesis del proyecto: “Con Claudia nos juntamos con ganas de hacer algo –habían trabajado juntos en La viuda de los jueves, hablamos del mundo de hoy, con una característica muy del siglo 21 que es la brutal manipulación de las sociedades primero, la posverdad, las fake news, vaciar de conceptos y de racionalidad el debate y por otro lado, el regreso de las religiones y sus guerras”, sostuvo.

Por otra parte, contó que junto a la autora, observaban que en las 3 Américas “una nueva derecha con el objetivo de una restauración conservadora que le resta derechos a la sociedad para llevarla a un siglo atrás y que iba de la mano de estas nuevas iglesias evangélicas que son medio hijas de los telepredicadores de los 80´”. En este marco, de acuerdo a lo que manifestó, empezaron a trabajar en eso y a indagar qué podría suceder si sucediera en Argentina. Fue entonces que “la realidad nos fue corriendo, los hechos fueron confirmando” lo que habían plasmado como una ficción.

Piñeyro aseguró que respetan el sentimiento religioso: “Es un modo de explicarse a uno mismo y el universo pero –exceptuó y planteó–el problema es la manipulación de ese sentimiento”.

Sin identificación

El diputado provincial y pastor evangelista Walter Ghione vio El Reino completa pero ahora, se concentra en algunas escenas “para estudiar y meterme en la cabeza de los autores”.

“Yo creo que es una ficción, están en su derecho expresarse”, dijo en el comienzo de su diálogo radial, también en Radiópolis Aunque parecía acordar con el producto, enseguida aclaró que no se identificó en absoluto con la serie. “Prácticamente el pastor no es uno que exista en nuestro país, es un sujeto corrupto manipulador y millonario. Intenta estigmatizar y hasta ridiculizar el movimiento evangelista. No encontré nada que me identifique”; lanzó.

“No se tomaron el tiempo de estar en templos evangélicos”, continuó y aseguró: “El mundo evangélico es muy diverso, hubiese sido lindo estar un poco identificados, deja muy mal parado al culto”.