En los últimos días, Luciana Salazar fue objeto de rumores sobre nuevas cirugías estéticas, desde una operación en las mamas hasta un retoque en los pómulos, consignan medios porteños.
Sin embargo, Luli sí tuvo recibir asistencia médica por motivos “visibles”. La modelo tuvo una reacción alérgica a un medicamento que le provocó sarpullido.
“Todo comenzó con un dolor la de muela de juicio, inaguantable. Rarísimo en mí, porque nunca en la vida me dolieron. Todavía los odontólogos no estaban habilitados para atender, entonces decidí llamar al mío para pedirle ayuda. Me aconsejó tomar un famoso antibiótico «dúo»”, contó Luciana a la revista Gente.
“Cinco días después, el dolor calmó por completo, pero siguió una afección mucho peor. Me broté. Me salió un sarpullido desde la punta de los pies hasta el cuello. Por suerte no me afectó la cara… Mi mamá también se asustó mucho", continuó.
“No podía más…¡Me rascaba a cuatro manos! Tanto que comenzaba a sangrarme. Me duró hasta hace pocos días. Estuve mal, mal. Me inyectaron Decadron, dos veces, y no se me iba”, detalló Luli, que compartió imágenes en Instagram del mal momento que vivió en la última semana de abril
