Este jueves, 4 de septiembre se cumplen once años de la muerte de Gustavo Cerati: compositor, enorme cantante, gran guitarrista y productor obsesivo. El músico que atravesó los cambios estéticos y sonoros de los 80, 90 y “dos miles” del rock argentino logró con sus canciones también trascender la frontera nacional.

Como solista o frontman de Soda Stereo, en formaciones más “indie” como Plan V o los dúos que integró junto a Daniel Melero y Flavio Etcheto, Cerati tendió puentes entre músicos sin dejar de lado el sutil encanto pop.

Su muerte fue un bajón generalizado. La agonía de cuatro años con daño cerebral había comenzado el 16 de mayo de 2010, luego de un recital el Caracas.

Cerati sufrió un ACV. El parte del Instituto Fleni, donde estuvo internado desde su regreso de Venezuela, fue el siguiente: “Extenso daño cerebral en el hemisferio cerebral izquierdo, daño del tronco cerebral secundario a hipertensión indocraneana”. Una infección respiratoria y otras complicaciones sellaron su suerte el 4 de septiembre de 2014.

Por suerte –y por “gracias, totales”– está su música en una veintena de discos de estudio, entre las grabaciones con Soda y los proyectos solistas, a los que se suman las placas en vivo, las colaboraciones y las reversiones.

El hashtag #ceratieterno se viralizó este jueves con miles de posteos en la red social X.