La ya tradicional fiesta de disfraces de Paraná, que se celebra cada agosto con la presencia de muchos rosarinos y de gente que llega de distintos puntos del país, fue suspendida por mal tiempo y se realizará una semana más tarde.

Desde la organización comunicaron, tanto en la web oficial como en las redes sociales de internet, que “a pesar de todos los esfuerzos tendientes a mantener la fecha original del evento –que iba a ser este domingo a la noche, víspera de feriado–, razones climáticas obligan a reprogramar la 17ª edición”.

La nueva fecha de la “Fiesta de Disfraces 2015” será, entonces, el sábado 22 de agosto, en el mismo horario y lugar. No es necesario cambiar las entradas: las de la fecha original serán válidas para la reprogramación.

“Esta decisión es tomada por la organización, en conjunto con los profesionales en seguridad, para resguardar a todas las personas que se encuentran trabajando en el predio y a quienes asistirán al evento”, argumentaron desde la capital entrerriana.

La capacidad hotelera de Paraná y de otras localidades aledañas ya estaba agotada para el fin de semana largo del 17 de agosto por las reservas hechas para la “XVII Fiesta de Disfraces más grande de Latinoamérica”, como se autodenomina. Ahora cada viajero deberá reacomodar su situación conforme al corrimiento de la fecha.

La fiesta es uno de los eventos más convocantes de la provincia vecina en el calendario turístico, y por eso también estaba agotada la capacidad hotelera no sólo de Paraná sino también, por caso, de Santa Fe y Villa Urquiza.

La Fiesta, que comenzó en 1999 cuando un grupo de amigos quiso festejar varios cumpleaños haciendo una fiesta juntos, se realiza anualmente y es un evento único por sus características, dimensión y trascendencia, ya que convoca a decenas de miles de personas en un mismo predio a cielo abierto.