Cuando una tiene que escribir por el aniversario de un medio de comunicación, un diario digital en este caso, donde trabajó varios años y desde la home cero se vienen a la cabeza una seguidilla de momentos importantes que formaron parte de la agitada cocina de esa redacción. Jornadas electorales larguísimas, discursos en cadena nacional, mundiales de fútbol, fumata blanca y fumata negra hasta que el Papa resultó argentino, robos y fugas de película, juicios de lesa humanidad que aplaudimos de pie, crónicas rojas y de las otras también, tragedias que dejaron de ser un número para convertirse en historias de carne y hueso tan cercanas como dar la vuelta a la manzana de casa.

Pero si una piensa en el cumpleaños de Rosario3.com hay algo que le gana terreno a los hechos periodísticos que informamos a lo largo de estos diez años. Al grupo humano que le da cuerpo a ese diario digital no hay con qué darle. El del comienzo, el que se fue sumando al poco tiempo, los más jóvenes que llegaron casi al final y fueron esa renovación de gran parte de la vieja guardia.

Todas y todos con trayectorias diversas, viniendo de distintos lugares, con experiencias más o menos compartidas pero siempre en una sintonía muy particular. Y rara de encontrar en estos tiempos, tanto como esa figurita difícil que nos permita completar el álbum.

Recuerdo una vez que alguien se acercó a la redacción –que en aquel momento funcionaba en el paso obligado para llegar a otros sectores de la empresa– y lanzó: “Rosario3.com es como Uruguay”. Y a mí, además de encantarme la comparación me quedó grabada.

Como dice Hernán Casciari, “los uruguayos son como nosotros pero sin errores”. Y es cierto que en Rosario3.com se respira algo de eso. Fue y es una redacción de brazos y puertas abiertas (esto último es literal porque en ese entonces no había ni qué golpear para entrar), donde el mate circula de mano en mano, donde la solidaridad y el compañerismo pesan más que cualquier otra cosa.

Rosario3.com es un poco ese paísito. Igual pero diferente. Un vecino que se añora cuando uno lo mira desde la otra orilla. Y siempre dan ganas de volver a ver.

(*) Virginia Giacosa es periodista y formó parte del grupo inicial de Rosario3.com, donde trabajó hasta 2013.