El centro de salud del barrio San Francisquito no pudo abrir las puertas este martes porque fue robado el fin de semana. Además de llevarse medicamentos y otros insumos, los ladrones también provocaron destrozos que impidieron la normal atención al público.

Los vecinos se encontraron un cartel en el ingreso indicando el cierre temporario por cuestiones de seguridad.

“Debido a que se produjo un robo en el centro de salud, el mismo permanecerá cerrado en el día de la fecha. Se evaluarán las medidas a tomar en equipo. Lamentamos las pérdidas y destrozos que nos afectan a todos, equipo y población”, sostiene el comunicado de los trabajadores del centro.

Un paciente que fue a buscar medicamentos dijo al programa La primera de la tarde (Radio 2) que no es la primera vez que roban en el centro de salud dependiente del gobierno provincial.

Incluso relató que por robos sufridos con anterioridad “se hicieron modificaciones edilicias para mejorar la seguridad pese a que sigue ocurriendo lo mismo”. De hecho, el frente y las ventanas del edificio están reforzadas con rejas para evitar ingresos.

El sacerdote del barrio San Francisquito se acercó hasta el centro de salud y manifestó que “hace tiempo espacio no tiene director” y añadió que “el vandalismo está presente en todos lados”.