Más adelante, La coordinadora del Programa de Inmunizaciones de la provincia, afirmaba: “como es de conocimiento general, hay poca disponibilidad de vacunas en el mundo entero y, dentro de él, en nuestro país; por lo que se ha decidido optimizar las dosis dando mayor accesibilidad a toda la población posible para que tengan la primera dosis; existen evidencias que revelan que la inoculación con la primera dosis, logra una protección contra las complicaciones graves, las largas internaciones que esta enfermedad ocasiona, sobre todo, en las personas más vulnerables que son, los mayores de 60 años y las personas que cuentan con comorbilidades.
La campaña y la vacuna están dirigidas a disminuir la morbi mortalidad de la enfermedad; o sea, los casos graves que son los que requieren atención en terapia intensiva, con complicaciones graves, y esto se logra con la primera dosis de las vacunas que disponemos hoy en el país con un 70-80% de eficacia.
De aplicar los esquemas completos, hoy llegaríamos a la mitad de la población objetivo; si logramos avanzar con primeras dosis cubriríamos a más personas, las que estarían protegidas contra las formas graves de la enfermedad; y, en un lapso de tres meses, tiempo en los que se ha evidenciado que los anticuerpos generados con la primera dosis persisten; seguir con la segunda dosis para alcanzar la inmunidad esperada.
Es por todo esto que el ministerio de Salud de la Nación tomó estas medidas con el criterio de optimizar. Optimizar es utilizar más primeras dosis para alcanzar a la mayor cantidad de población posible inoculada”.
La entrevistada, a manera de cierre, expresó: “Quisiera hacer una salvedad: el personal de salud que cumpla funciones de riesgo; o sea, quienes trabajan en la primera línea de contacto con la infección deben tener el esquema completo de las dos dosis”.
*Soledad Guerrero, Coordinadora del Programa de Inmunizaciones de la provincia de Santa Fe.
