Los accesorios se constituyen como la verdadera frutilla del postre en cualquier outfit. En el caso de los bolsos, además de brindar un detalle de color, de textura y forma, los mismos resultan imprescindibles desde lo funcional para poder transportar lo que se necesite a cualquier salida.
Este año, la moda opta por las slim bags, unas pequeñas carteras alargadas que postulan el paradigma de la sencillez con un giro moderno. Las y los expertos recomiendan utilizarlas en tonos oscuros para un detalle más refinado y distintivo, con el negro o rojo como los predominantes de la temporada.
Respecto de los outfits, cualquiera es resaltado con este tipo de bolso de mano. Desde un vestido o un conjunto para una salida nocturna, hasta la simpleza de un mix casual que entremezcle jeans y camisas básicas. Una declaración de moda que no necesita de grandes esfuerzos.
