"Más que explicar porqué no firmó el último balance de Vicentin, KPMG tendrá que explicar lo que firmó en los anteriores balances". La frase es de uno de los abogados civiles y comerciales que más sigue el caso del mega default de la agroexportadora y la dijo apenas había estallado su impago de más de 1.500 millones de dólares allá por finales de 2019.

Ocurría que KPMG, la consultora internacional, venía certificando todos los balances de la firma santafesina en los últimos años, pero se negó a rubricar el último antes del default. Un balance, que cerró a mediados de 2019, pero que apareció recién a finales del 2020 y que además de no poder explicar qué había ocurrido con la empresa que pasó de mostrar números excelentes a un rojo inmanejable en apenas tres meses tampoco fue avalado por auditora de prestigio alguna.

Y la sospecha de que los balances anteriores escondían las razones de las crisis quedó confirmada cuando la llamada "autopsia contable" detectó que Vicentin, con el aval de KPMG, hacía pasar por activos los granos recibidos que no había pagado que en realidad eran un pasivo. ¿KPMG es la consultora que escondió el pasivo de Vicentin de 800 millones de dólares cuando avaló los balances de 2017 y 2018?

Con números que le cerraban, entonces, la aceitera podía seguir requiriendo financiamiento bancario nacional e internacional. ¿Es KPMG cómplice de la supuesta estafa? ¿Podría haber Vicentin realizado las maniobras de estafa de las que lo acusan sin la rúbrica de la consultora internacional avlanado lo que mostraban sus balances?

Los fiscales de la Unidad de Delitos Económicos del MPA siempre merodearon el tema. Y no sólo siempre estuvieron analizando la tesis de que la manipulación de los balances fue clave para que la supuesta estafa se concrete, sino que también siguen la pista de la colaboración de la consultora en el armado de una sofisticada ingeniería societaria (off shore) que serviría para proteger activos de los accionistas y de la empresa y dejarlos fuera del alcance de los acreedores a los que Vicentin dejó de abonarles 1.500 millones de dólares.

Incluso, en diciembre pasado, en paralelo a la marcha de la convocatoria de acreedores y a las investigaciones penales en curso, se sumó una demanda civil de daños y perjuicios por más de 25 millones de dólares contra ex directores y ex síndicos de la aceitera, así como también contra el auditor certificante de los balances y contra la firma KPMG Argentina y KPMG Internacional que los avalaron los estados contables de la defaulteada aceitera. La demanda la había presentado un grupo de empresas agropecuarias, que son acreedores comerciales, con el patrocino del estudio Robiolo y Asociados. Luego, ya avanzado el año, el abogado Froilán Ravena presentó una denuncia penal por asociación ilícita que involucraba a KMPG y que fue la base sobre la que los fiscales apuraron el acelerador.

Y la novedad es que este martes el fiscal Miguel Moreno encabezó una serie de allanamientos a las oficinas de Rosario y Buenos Aires de KPMG, que incluyó hasta el domicilio particular del encargado de la sección de Agronegocios de la consultora.

Con la orden del Juez Penal de Primera Instancia de la Segunda Circunscripción – Rosario, Román Lanzón se realizó un allanamiento sobre el domicilio situado en la calle Avenida MADRES PLAZA 25 DE MAYO Nro. 3020 – PISO 3 de la ciudad de Rosario, Provincia de Santa Fe, lugar donde funciona la sede social de KPMG.

Allí secuestraron:

x) un cpu marca dell modelo d11s – serie nro. 8n5qgk2, nomenclado como “a-01”;

x) un pendrive marca data traveler de 8gb – g3, nomenclado como “a-02”;

x) una notebook marca dell – serie 11352680642 de color negro, nomenclado como “a-03”;

 x) una notebook marca dell – se-rie 4657731266 de color negro, nomenclado como “a-04”;

x) una notebook marca dell – serie 15413992130 de color negro, nomenclado como “a-05”;

x) una notebook marca dell – se-rie 9904851650 de color negro, nomenclado como “a-06”;

x) un teléfono celular marca samsung modelo s21 de color negro patrón numérico “19802022”

x. un teléfono celular marca samsung modelo j7 de color champagne, con funda de color negro, con pantalla táctil en estado regular y templado astillado,

En Buenos Aires, en tanto, a efectivos del Departamento de Investigaciones Antimafia de la Policía Federal Argentina, llevaron a cabo un allanamiento en las oficinas de la empresa KPMG sito calle Bouchard 710, piso 1 y piso 6, Puerto Madero, procediendo al secuestro de documentos de interés para la causa en computo de 13 fs. y dos discos externos de 2T cada uno con información descargada del servidor de la empresa

Y en Buenos Aires además llevaron a cabo un allanamiento en la vivienda de calle Altoaguirre 2635 (barrio Villa Urquiza) adonde vive Eduardo Harnan, socio de la firma KPMG, procediendo al secuestro de un celular marca iPhone, una notebook marca DELL, 2 Pen drive, un token, una libreta con anotaciones varias.