Garbarino empezó a achicar la deuda salarial con sus empleados y este viernes reabrió las puertas de sus cuatro locales en Rosario, cerrados desde el fin de semana. También ocurrió lo mismo en otras ciudades en las que la cadena de electrodométicos opera.
"Hubo un acuerdo entre partes", le dijo a Rosario3 Juan Pedonesi, empleado de la firma. "Ellos manifestaron su interés de reabrir, empezaron a pagar parte de los adeudaos y nosotros nos comprometimos a volver a los puestos", señaló.
En rigor, ya desde el miércoles la cadena empezó a depositar parte de los salarios adeudados y terminó el jueve de abonar marzo. "Nos dijeron que este viernes ya empezaron a depositar parte del sueldo de abril, que irán completando en cuotas", agregó.
El acuerdo se terminó de definir anoche en una audiencia realizada en el Ministerio de Trabajo de la Nación. Esta mañana hubo otra reunión, pero en la cartera laboral de Santa Fe y se pautó un nuevo encuentro el miércoles próximo para ir viendo
La empresa tiene 70 empleados en Rosario, entre activos y suspendidos. A los activo. la empresa les achicó la deuda más que a los supendidos.
Garbarino -afectada por la crisis del consumo, el aumento de las ventas online (adonde no tenía muy desarrollado el comercio) y las restricciones a las circulación- enfrenta una muy áspira situación financiera, con casi 100 millones de dólares en cheques rebotados, según datos del Banco Central.
"Si bien persisten los retrasos, están demostrando interés de pago, aunque sea en cuotas", agregó Pedonesi, quien resaltó que si bien la situación sigue siendo muy delicad, "al menos se levantaron las persianas y la gente está trabajando".
