El fin de semana largo deja más tiempo para la lectura. Así que, al "run run" de los negocios que Rosario3 publica los domingos, y podes leer haciendo clic acá, vamos este lunes a uno extra de feriado y bien cargado de novedades.

1) Un conflicto laboral en un puerto no tiene ganadores. El que pierde es el puerto ya que la carga siempre previere evitar las terminales conflictivas. Pero solucionado el conflicto laboral en TPR, la concesionaria de las terminales I y II de Puerto Rosario, llegó el momento de discutir en serio el futuro de los muelles rosarinos. Y quien tienen la pelota en su cancha es Ultramar, un poderosos grupo logístico chileno que tiene la mitad accionaria del TPR. Y hacia ellos están apuntando las gestiones las autoridades del Ente Administrador del Puerto de Rosario (Enapro).

La situación es la siguiente: dos de los tres muelles concesionados a TPR están fuera de servicio por riesgos operativos. Y el mulle sur, que es el que sí opera también necesita inversiones de fondo. ¿Qué es lo que quiere hacer TPR? ¿Cuál es su plan de inversiones? ¿Cuál es su plan para todo el complejo? Todo eso no se sabe. No hay nada de eso presentado. Así como el Enapro presentó un plan estratégico para todo el complejo Puerto Rosario, no se sabe qué quiere hacer TPR con las terminales I y II.

Y es Ultramar la empresa que debe marcar el rumbo porque el otro socio de TPR es Vicentin, que ya tiene el boleto picado. El grupo santafesino no está en condiciones económicas de conseguir el financiamiento tras el default de la aceitera y las investigaciones penales en su contra.

Es más, a TPR se le hace muy difícil conseguir financiamiento bancario. Como dato, a instancias de un funcionario municipal de alto rango, la concesionaria portuaria fue a pedir en el arranque de la gestión de Pablo Javkin un millonario crédito en dólares al Banco Municipal (en rigor, renovar una línea que tenía y estaba terminando). Pero si bien TPR terminó de abonar el crédito, los números no validaban el otorgamiento de un nuevo crédito y el propio ex presidente del Banco, Adrián Giacchino, con el visto bueno del intendente, rechazó el pedio. Además, se trataba de una empresa que mantiene una millonaria deuda en DREI con la Municipalidad. Todo eso sin nombrar el riesgo reputacional de prestarle a una empresa que tiene como accionistas a Vicentin, más si es un banco público. En definitiva, sin crédito, el aporte deberá venir de los socios. Y al estar fuera de juego Vicentin, la llave la tiene Ultramar.

Atención que no es menor el tema de los números de TPR. Es que la empresa, a decir verdad, no nada en un río de abundancia. Todo lo contrario. Hay años que pierde mucho, otros que pierde poco, algunos que saca un empate; etc. Y esa realidad también debe ser tenida en cuenta al exigirle el cumplimiento de inversiones. ¿Cómo pedirle en esas condiciones a TPR una inversión de 300 millones de dólares que requeriría refaccionar integralmente los cerca de 1.600 metros de muelles que tienen?

En definitiva, llegó la hora de que cada parte ponga sus cartas sobre la mesa y se negocie un acuerdo en serio. ¿Ultramar se quiere quedar o se quiere ir antes del 2032, cuando termina la concesión? ¿Quiere seguir con Vicentin o buscar un nuevo socio que le sume y no le reste? Llegó la hora de que concesionario y poder concedente se pongan a negociar un acuerdo.

Un acuerdo que nada tiene que ver con el que dejó firmado la anterior gestión del Enapro y que la actual administración dejó sin efecto porque era claramente perjudicial para el Estado. ¿Qué decía? Que TPR ponía 25 millones de dólares (IVA incluido) para el muelle sur a cambio de 25 años más de concesión con la cláusula de que si la refacción costaba más sería a cargo del sector público. Para tener una idea, el costo de refacción iba a demandar entre 35 y 40 millones de dólares más de los 25 que pondría la concesionaria. Y nada decía de los otros dos muelles (unos 800 metros). Claramente, a pedir de TPR. Y no en vano el documento con esas polémicas cláusulas no estaba en el ente sino en un estudio jurídic. 

2) Ya que arrancamos con el puerto. No deja de llamar la atención como los funcionarios nacionales le esquivan a la “foto” en el puerto local, mientras que se muestran en el de la ciudad de Santa Fe. Por ejemplo, días atrás el secretario de Transporte de la Nación, Diego Giuliano, recorrió los muelles capitalinos para ver la marcha de las inversiones del gobierno nacional en esa terminal. ¿Y los $200 millones que el subsecretario de Puertos de la Nación, Leonardo Cabrera, había prometido para Puerto Rosario? Ni noticias.

El nuevo muelle de La Fluvial

Por eso, las inversiones en Rosario son del ente portuario, que tiene una caja más chica. Por ejemplo, esta semana inauguraron el bar de la Nueva Terminal Fluvial. El bar lo opera el propio Enapro porque entendieron que por las obras de refacción en la estación, que dificultan el paso o frenan la vista, no era demasiado atractivo para una empresa. Pero la idea es que en un segundo momento se concesione su operación. Además, tras terminar las inversiones en refaccionar el muelle 1 de la Fluvial, ahora preparan inversiones para el segundo con miras a dejarlo totalmente reconstruido para el final de gestión.

Al que, pese a todo, se lo vio muy sonriente fue al director de TPR por Vicentin, Gustavo Nardelli. El ejecutivo estuvo celebrando el jueves en la Fundación Libertad el paso de Mauricio Macri por Rosario, en uno de los pocos encuentros empresarios en los que mostró desde el default de Vicentin. ¿Será que así como Vicentin apuesta a la llegada de un gobierno de Justo por el Cambio para no tener en la Casa Rosada un enemigo, TPR apuesta a que un gobierno amarillo en Santa Fe también le afloje la presión que recibe de la Provincia para que invierta? Por el contrario, quién se mostró en esa misma reunión con Macri preocupado por Vicentin fue el empresario Carlos Castellani. Es que recibió una carta documento por su paso como director del Banco Nación durante el gobierno de Macri, que fue el que le habilitó el millonario crédito de u$ss330 millones, por encima de lo que la entidad estaba habilitada para girar a una empresa.

3) Ya que estamos sobrevolando el tema Vicentin, la semana pasada ocurrió un fuerte cruce entre la empresa y un grupo de 70 acreedores granarios. Ocurrió que uno de sus directivos, Estanislao Bougain, estuvo de ronda por los medios alertando que “el problema de la demora por la suspensión de la convocatoria por parte de la Corte de Santa Fe no la está sufriendo Vicentin, la están sufriendo los acreedores”. A lo que el fideicomiso Acreedores Granarios le respondió categorizando a la empresa de “cinismo extremo” alertando que fueron a la Corte para que “no los vuelvan a engañar”.

Cada parte tiene sus apoyos. La Cámara de Comercio, Industria y Servicios de San Lorenzo emitió un comunicado en el que expresó su “profunda preocupación” por la intervención de la Corte asegurando que “toda una región que, ajena a cuestiones económicas en pugna, desea que se resuelva el concurso para definitivamente retomar la actividad de una de las empresas más importantes del país”.

Por el contrario, los sindicatos de aceiteros de Reconquista y San Lorenzo señalaron que “a avocación de la Corte es necesaria”. Según sostuvieron en un escrito presentado al máximo tribunal, “la voz de los trabajadores de Avellaneda, no parece ser escuchada y cada vez que avanzaba el Concurso, se confirma. Al día de hoy no existe una propuesta de inversión, continuidad o interés de parte de los Interesados Estratégicos, respecto al “mal llamado Nodo Norte” de la empresa. Y de parte de la empresa, hay una ausencia de propuesta o la misma es irrisoria, hacia su parte Norte”.

Pero más allá del cruce, hay temas de fondo que emerge. Si a juzgar por la empresa la propuesta de pago que hace es tan buena y tiene tanto apoyo mientras que el intento de cram down sería puro humo, ¿cuál es el riesgo de atravesar ese período? ¿No tendría que pasarlo caminando? ¿O es que el apuro es porque la propuesta es muy buena no para los acreedores sino para los tres actuales interesados en quedarse con Vicentin (ACA, Bunge y Viterra)? Y el temor es que al estar la vara tan baja pueda aparecer una oferta superadora.

Veamos: Vicentin les ofrece a los acreedores quirografarios pagarles u$s270 M en dos cuotas arribando un costo final del u$s330 M cuando se sume el pago al Banco Nación, como acreedor privilegiado (más los ingresos por la actividad de la planta de etanol). Entonces, con la brecha cambiaria actual, los u$s 330M oficiales que necesitan, con traer 154 millones de dólares efectivos se iguala la oferta. Y los activos de Vicentin valen mucho más.

Es rigor, el único aporte de capital que recibirá son los 300 millones de dólares que pondrá Viterra por el 33% de las acciones que Vicentin tiene en Renova. Es que Bunge y ACA ponen dinero pero para pagar el fazón que contrataron. En otras palabras, no es un aporte, sino un pago de servicios. Pero, como se dijo antes, los activos valen mucho más. Por ejemplo, sólo Renopak vale 50 millones de dólares, a lo que hay que sumar el puerto de San Lorenzo (cuya terminal vecina, la de Molinos Agro, está valorizada en u$s400 M), la planta de Ricardone y todas las instalaciones en el norte provincial.

4) Cambio de tema. Vamos por el caso del financista Luis Herrera, cuyo default sigue conmocionando a los círculos financieros. Y la novedad viene por el lado de las acciones civiles de ahorristas que se cansaron del limbo permanente en el que están, ya que a meses de que fuera rechazada la apertura del concurso Herrera sigue sin dar señales claras de cómo afrontará su deuda impaga, que en círculos financieros calculan en torno a los 30 millones de dólares.

Así que mientras que muchos ahorristas (sobre todo los que invirtieron en negro) ya pasaron a pérdida lo allí depositado (y, con gran dolor, no quieren ni hablar del tema porque piensan que nunca lo recuperarán), otros están apurando las acciones en sede civil. En ese marco, en los últimos días se iniciaron contra Herrera dos nuevas demandas por juicios ejecutivos en el foro civil por parte de ahorristas que tenían firmado contratos de mutuo, que el financista reconoció y entregó los documentos que así lo prueban. Y varios más ya se están preparando.

Pero la avanzada civil está reducida a quien tiene esos contratos. Por el contrario, varios ahorristas que sólo pueden mostrar los informes que recibían de Herrera y los recibos firmados por el financista la tienen más complicada, sobre todo luego de que en sede judicial el empresario negara (ante las autoridades de la Justicia y en audiencia oficial) haber operado en el mercado de Chicago y tener una mesa de dinero paralela a su agencia de Bolsa. Si bien la negación es, claramente, parte de la estrategia penal, sus dichos renovaron la sorpresa en el círculo empresario que lo conoce sobre su persona ya que si de algo se jactó siempre fue de sus complejas operaciones de derivados en el mercado de Chicago.

El tema es que el limbo en el que está el caso también está exasperando a otros ahorristas, a quienes el financista ya ni recibe. Es más, desde hace tiempo el contacto es mínimo, a diferencia de las visitas regulares que había en su oficina en calle Rioja. El caso es que hubo un ahorrista muy molesto por la falta de resoluciones que, pese a que ya le habían iniciado denuncias penales a Herrera, se acercaron personalmente a fiscalía para ver por qué no avanza la causa y presentar colaboración, generando así fuertes cortocircuitos entre el cliente y sus propios abogados, que renunciaron a representarlo. 

¿Y las investigaciones penales? En el mismo momento en que lo imputen, los fiscales pedirán la detención del financista. Esa es la información que trascendió desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA).

5) Ya que estamos por el lado de los financistas que recorren tribunales, la semana pasada el dueño de la financiera Bolsafé Valores, de ciudad de Santa Fe, fue condenado a la pena de 15 años de prisión por haber cometido 569 estafas por un monto de 250 millones de pesos a valores de 2016.

Se trata del contador Mario Rossini, quien además fue condenado por el Tribunal Oral Federal de Santa Fe a pagar una multa equivalente a tres veces el monto de las operaciones realizadas en forma fraudulenta. En la misma sentencia, los jueces José María Escobar Cello, Luciano Lauría y Germán Schutter Schneider condenaron a su hermano Omar Rossini a la pena de 3 años y 6 meses de prisión, en tanto Mercedes Leiva recibió una sanción de 3 años de prisión en suspenso.

Según la Justicia, Rossini administró de manera fraudulenta los bienes, títulos, valores y dinero que le fueron confiados en custodia por al menos 408 damnificados. El  datito que queremos aportar en esta columna es que en el fallo del Tribunal Oral Federal se rechazaron las demandas económicas de unos 28 damnificados del caso, todos con el mismo abogado, debido a errores en la presentación. Sí, primero los estafó Rossini y luego el abogado presentó mal lo papeles.

6) Para ir cerrando el run run extra del lunes, vamos a darle espacio a quienes sí hacen bien las cosas en el mercado financiero. Y es que pese a la caída de dos Sociedades de Garantías Recíprocas (SGR), que no pudieron afrontar el impago de cheques empresas que habían garantizado, parece que el conflicto quedó encapsulado en esas dos compañías. “No hay un problema sistémico y el sistema goza de buena salud”, le dijo a Rosario3 Juan Politi, vicepresidente de Allaria Ledesma, la principal agencia de Bolsa del país. "No hay problemas cambiarios sino que se declararon insolventes algunas pymes y las SGR en cuestión tenían garantías que no son de facil liquidación", comentó. “Me parece que la turbulencia sirvió para que los inversores también puedan discernir entre las SGR que operan en un segmento de empresas muy comprometidas o con estrategias de negocios más jugadas de la que no, mostrando un diferencial de tasa entre unas y otras”, agregó. "En un mes estará normalizada la liquidez en el sector", calculó. 

Juan Politi, vice de la agencia de Bolsa Allaria Ledesma, en el centro, durante su presentación de Vicentin.

Y parece que los fondos están volviendo a “tomar riesgo SGR”, como se dice en la jerga bursátil. Es que luego de retirarse ante la caída de la dos SGR, los Fondos Comunes de Inversión (FCI) volvieron a apostar por papeles garantizados por SGR. Así quedó claro en la colocación de esta semana de una Obligación Negociable (ON) por parte de Agronorte, una de las principales concesionarias John Deere con sede en San Justo, que colocó 600 mil dólares pagando una tasa de 0.00% y recibiendo ofertas por 15 millones de dólares. “Esto muestra avidez de inversores por resguardarse en dólares y que mercado vuelve a tomar riesgo SGR, ya que la ON estaba garantizada por Bind”, le dijo a Rosario3 el agente de Bolsa, Adrián Tarallo, quien estructuró y colocó la ON. Tarallo no lo dice, pero -claro está- también pesó en el éxito de la colocación el know how de su agencia de Bolsa, líder en el segmento.

7) Y finalmente, un pack de cuatro buenas noticias de negocios para ponerle optimismo al lunes feriado.

Primero, una inversión inmobiliaria: Pilay anunció una inversión inicial de 25 millones de dólares (junto a la desarolladora Life) para lanzar cinco barrios privados en Ibarlucea, sobre la Ruta Nacional 34. El predio es de 170 hectáreas con 1.500 lotes para viviendas unifamiliares (de 450 m2), una nueva sede para el Club Bancario, un distrito comercial y un centro educativo. Prometen contar con suministro de agua potable, cloacas, tendido eléctrico subterráneo y calles internas pavimentadas, todos con su propio espejo de agua que justifica el nombre: Cinco Lagos.

Segundo, una de tecnología: BLC Power Generation -la empresa de soluciones de gestión operativa para plantas de energía renovables del grupo BLC Global, que preside Carlos Cerrutti, ex presidente del Polo Tecnológico de Rosario- se prepara para desembarcar en Chile y México, luego de su reciente incursión en Colombia, país en el que ya gestiona doce parques solares. Y con semejante éxito, en 2023 concretará el arribo a los otras dos grandes economías del América latina que también está pisando fuerte en el desarrollo de energías renovables.

Tercero, una de turismo: Rosario tuvo este fin de semana una ocupación hotelera del 100%, según datos de la Secretaría de Turismo de Santa Fe. Según datos del gobierno nacional, en la provincia de Santa Fe se destacaron Rosario con 98% de ocupación; la ciudad de Santa Fe, 90%; Rafaela, 100%; Oliveros, 90%; Villa Constitución 80%; Melincué, 70% y Reconquista, 85%. "Con hoteleria y gastronomía a plena capacidad, la ciudad tuvo eventos masivos para todos los públicos durante el fin de semana largo. Y vamos por más. Claro que tenemos problemas, pero esto también es Rosario", se entusiasmó Sebastián Chale, secretario de Desarollo.

Y cuarto, una de comercio: La facturación privada de las empresas de Rosario aumentó 17% en mayo de manera interanual, registrando un crecimiento del 10% en los primeros 5 meses del año, siendo la más alta en la última década, según el último informe de la Fundación Banco Municipal.