Gremio presentará un reclamo ante la Conmebol porque supuestamente Marcelo Gallardo incumplió la sanción que pesaba sobre él. El entrenador de River no debía tener contacto con el plantel durante el partido y, según entienden desde el equipo brasileño, ingresó al vestuario en el entretiempo y durante el encuentro se comunicó por handy con el asistente.

La decisión fue confirmada por Romildo Bolzan, presidente de Gremio, en diálogo con TyC Sports, quien además reclamó por una mano del colombiano en Rafael Santos Borré en el primer gol de River. Sostuvo que esa jugada no fue consultada por el VAR, que sí se usó para cobrar el penal de la victoria del Millonario.

Gallardo fue sancionado por la Conmebol por haber salido tarde a jugar el segundo tiempo del cotejo de ida ante Gremio en Buenos Aires, y por eso no podía acompañar a su equipo antes y durante el partido.

No obstante, Gallardo desobedeció la sanción e ingresó en el entretiempo del cotejo y además se comunicó con su ayudante de campo Matías Biscay durante el juego mediante un handy.

Gremio tendrá 24 horas para reclamar ya que lo hecho por el entrenador de River viola el artículo 56 del reglamento de la Conmebol que cita como un motivo de reclamo de un resultado de un partido a "una decisión de un oficial de partido que hubiera influido en el resultado de un encuentro exclusivamente en supuestos de corrupción arbitral".

Ese punto es reafirmado en el restante punto del citado artículo que especifica que se puede reclamar ante "cualquier otro incidente grave, establecido en el presente reglamento, que haya tenido incidencia en el resultado del partido".

Gremio puede argumentar que la charla técnica de Gallardo en el entretiempo influyó en el resultado, recordando que al finalizar el primer período Gremio ganaba 1 a 0 y avanzaba a la final.

Gallardo fue filmado y fotografiado en el momento en que se trasladaba al vestuario y cuando ingresaba en el mismo, situación que alertó a un veedor de la Conmebol quien observó cuando el DT se retiraba del vestuario.

El artículo 76 de la Conmebol indica que "el director deportivo, entrenador, cualquier miembro del cuerpo técnico o restantes oficiales, sancionados con la suspensión de sus funciones, podrán presenciar los partidos en los cuales esté vigente su suspensión únicamente desde las gradas. No podrá acceder al vestuario, túnel, banca o área técnica antes ni durante el partido, ni podrá por ningún medio comunicarse con su equipo".

El no cumplir con la sanción podría ocasionar un serio castigo en este caso a Gallardo como la suspensión de ejercer cualquier función relacionada con el fútbol por un número de partidos, la prohibición de ejercer cualquier actividad relacionada con el fútbol, prohibición de accesos al estadio y retirada de licencia.