Las apuestas deportivas online comenzaron a popularizarse en Argentina hace ya varios años, y fue en 2018 cuando hubo un punto de quiebre derivado de la llegada de diferentes casas de apuestas que empezaron a instalar su negocio en el país.
Se trata de un mercado que creció a un ritmo acelerado durante los últimos tres años, fundamentalmente a partir del aislamiento instaurado en el marco de la pandemia de covid 19.
El sector generó ingresos por aproximadamente 2.500 millones de dólares al cierre del 2022, lo que representó un incremento anual del 80% con respecto al 2021 según datos de la Afip, que en 2022 instrumentó un impuesto que grava las apuestas online.
En ese marco, las plataformas para intentar ganar dinero a costa de los resultados deportivos comenzaron a volverse cada vez más populares entre usuarios adolescentes, que en algunos casos se vuelven adictos al uso de estas aplicaciones.
Así lo advierte Débora Blanca, psicóloga especialista en ludopatía que dialogó con el programa Punto Medio (Radio 2) para explicar los alcances y riesgos de este fenómeno.
En primer lugar, la especialista definió a la ludopatía como "la adicción a los juegos de apuestas", juegos de azar por los que se desarrolla un comportamiento "compulsivo o patológico". Y agregó que esto se volvió mucho más fácil de identificar a raíz de que, en la actualidad, "ya no hay que ir a un casino o un bingo" para apostar.
Blanca señaló que una de las particularidades de este tipo de juego online "novedoso y en fuerte crecimiento" es que "los apostadores creen que si saben de deporte van a ganar", por lo que entre aficionados del fútbol y otras disciplinas deportivas es más fácil que proliferen las apuestas.
"Lo que vemos los profesionales de la salud que nos especializamos en ludopatía es un tremendo crecimiento desde el año pasado", dijo la psicóloga, y apuntó: "Empezamos a recibir correos de docentes que estaban preocupados porque los chicos salían desesperados al recreo para apostar con el celular".
Un "quitapenas" que hace "estragos" en adolescentes
Con respecto la rápida expansión que tuvo el juego online, la especialista remarcó que se trata de una práctica que "no distingue clase social, género ni profesión". "La posibilidad de ganar dinero rápido, fácil y sin mucho esfuerzo funciona como un quitapenas" para aquellas personas que atraviesan situaciones de malestar emocional, de la misma manera en que lo hacen las sustancias como el alcohol u otras drogas. "Están también estas otras adicciones, como las ludopatías, las compras compulsivas, la adicción a internet o al celular", señaló Blanca. Pero una particularidad del juego online, advirtió, es que representa una de las adicciones "de las que se habla menos y que está haciendo estragos en los chicos". A su vez, mencionó el incremento de las tasas de suicidio como fenómeno global y apuntó que se trata de un fenómemo que afecta particularmente a jóvenes y adolescentes. Y teniendo en cuenta esto, añadió: "La ludopatía y el suicidio siempre estuvieron relacionadas. Es sabido que muchas veces el ludópata, después de haber perdido un montón de dinero y tener deudas que no puede pagar, encuentra el suicidio como única solución". Bajo la lógica del juego y las apuestas, "los chicos entran en el mismo circuito que los grandes", enfatizó. Y se trata de una adicción que representa un problema que "está naturalizado" y sobre el cual los padres tienen que hablar más con sus hijos e hijas, analizó la especialista. Por otro lado, manifestó que uno de los puntos más preocupantes es el de la publicidad, que según su mirada necesita regulaciones más estrictas. Pero las normativas que alcanzan al negocio de las apuestas online todavía están muy verdes. En Santa Fe, por ejemplo, funcionaban por decreto hasta que la legislatura provincial aprobó un proyecto de legalización a fines del año pasado. En la Argentina, el juego online está regulado en 17 provincias, y los principales operadores del mercado son firmas internacionales asociadas a empresarios locales. "En españa llevó 10 años regular la publicidad" de las apuestas online, dijo Blanca, y agregó que durante ese tiempo "se enfermaron un montón de personas y hubo muchas pérdidas". También trazó una distinción entre la práctica de apostar ocasionalmente y como diversión, lo que calificó como "inocuo", y los casos en los que el apostador o la apostadora "están mucho más atentos a los resultados de los partidos" y comienzan a perder el control sobre el impulso de jugar, algo sobre lo que "hay que estar alerta". La nota completa:
