La Organización Mundial de la Salud (OMS) estimó que el 10% de la población mundial -unas 760 millones de personas- pudo haber tenido coronavirus, mientras algunos países de Europa anunciaron más restricciones y otros evalúan hacerlo ante una alarmante segunda ola de contagios.

La estimación fue comentada por el director de emergencias sanitarias de la OMS, Mike Ryan, quien enfatizó que la situación epidemiológica varía fuertemente entre regiones y entre grupos de población.

Un 10% de la población mundial significa más de 700 millones de personas, frente a los 35 millones de casos confirmados que se han reportado desde enero.

En su análisis, Ryan destacó que estas cifras indican que "la gran mayoría sigue bajo amenaza" de contagiarse con el coronavirus, que causó más de un millón de muertes en el mundo, reprodujo la agencia de noticias EFE.

Ryan participó este lunes en el Comité Ejecutivo de la OMS, la primera reunión en la que se admitió en la sede de la Organización la presencia de una parte de delegados de los Estado miembros. Además, una encuesta realizada por la OMS entre junio y agosto en 130 países, es la primera en detallar el "impacto devastador" de la covid-19 en el acceso a los servicios de salud mental.

"El duelo, el aislamiento, la pérdida de ingresos y el miedo están desencadenando problemas de salud mental o exacerbando los existentes", especificó un comunicado de la OMS, y agregó que, "mientras tanto, la covid-19 puede provocar complicaciones neurológicas y mentales, como delirio, agitación y accidente cerebrovascular".

Solo diez países tienen el 70% del total de infecciones y decesos reportados en todo el planeta, y tres de ellos, Estados Unidos, India y Brasil, representan la mitad del acumulado mundial.

Por continentes, América contabiliza 17,1 millones de casos de la covid-19 y más de 570.000 decesos, de los cuales 7,43 millones y casi 210.000, respectivamente, corresponden a Estados Unidos, el país más afectado en el mundo por la pandemia.

Sin control sobre la expansión del virus, en la última jornada Estados Unidos reportó unos 49.000 positivos y uno de ellos de la secretaria de prensa y principal vocera del también contagiado presidente Donald Trump, Kayleigh McEnanny.

En el caso de Brasil, la curva de nuevos casos parece haberse aplacado, con 26.000 nuevos ayer, una cifra que puede indicar que el ritmo de infecciones realmente comenzó a disminuir.

El sur de Asia acumula 7,4 millones de infectados y 120.237 muertes, mientras que el continente europeo registra 6,2 millones y 240.652, respectivamente, y los países ensayan nuevas medidas para mitigar los efectos de la segunda ola de la covid-19.

En el Reino Unido, el Gobierno británico planea imponer un nuevo confinamiento con restricciones más estrictas que las actuales, incluido el cierre de bares, pubs y la prohibición de todo contacto social fuera de los grupos familiares, según un documento filtrado al diario The Guardian.

De acuerdo con la información revelada, las medidas se implementarían bajo un esquema de tres niveles con un sistema que se asemeja a un semáforo, si no se logra controlar los casos, que se dispararon en los últimos días y que ayer contabilizaron casi 23.000.

En Italia, por su parte, el primer ministro Giuseppe Conte pidió a los italianos "renunciar a algunas libertades" para enfrentar el virus, a dos días de que venza el decreto sobre las medidas nacionales para frenar la pandemia y cuya renovación podría incluir la obligatoriedad de usar tapabocas en espacios abiertos en todo el país.

La situación respecto de las restricciones en la capital francesa es más certera. Las autoridades informaron que los cafés y bares de París cerrarán a partir de mañana y la asistencia a las universidades se recortará a la mitad, en medio de la alerta máxima declarada para contener el aumento preocupante de los contagios.

Esta decisión, que tendrá vigencia al menos por 15 días, fue tomada luego de darse a conocer que hay 260 infectados por cada 100.000 habitantes, además de que 36% de las camas de los servicios de reanimación está ya ocupado por enfermos de covid-19.

La buena noticia de la jornada provino de Oceanía. La primera ministra neozelandesa, Jacinda Ardern, dijo hoy que su país "venció nuevamente al coronavirus" y anunció que a partir de la medianoche del miércoles la ciudad de Auckland, la más poblada del país, regresará a la normalidad luego del confinamiento bajo el que estuvo en agosto al detectarse un rebrote, según publicó Télam.