Las restricciones sanitarias impuestas durante la pandemia sacudieron la economía nacional y por ende, local. Uno de los sectores que se percibe más afectado es el gastronómico que ya lleva varias manifestaciones a cuesta con el reclamo reiterado al gobierno provincial de asistencia. En esta oportunidad, uno de sus representantes, dueño de la chopería Gorostarzu, Jorge Sauán, decidió acercarse más con una carta directa a Omar Perotti. Para su sorpresa, el gobernador lo llamó por teléfono dos días después y, según advirtió, deslizó la posibilidad de extender los subsidios al personal.

El periodista Roberto Caferra (Radiópolis, Radio 2) leyó al aire un extracto del mensaje que el gastronómico envió al teléfono del jefe de la Casa Gris. “Buenas noches, señor gobernador, mi nombre es Jorge Saúan. Disculpe el horario pero recién estoy volviendo a mi casa después de cerrar el negocio. Soy uno de los dueños del bar Gorostarzu, miembro del grupo autoconvocado UGAR de la ciudad de Rosario de gastronómicos rosarinos. Soy gastronómico desde hace varios años pero con las restricciones muchas cosas cambiaron, nuestros comercios cambiaron, nuestros horarios cambiaron, y en este momento con las puertas ya cerradas de la chopería termino de acomodar el local. La verdad, muy cansado por todo esto.

Trato de entender su gestión al ver la caja que maneja la Provincia. La falta de sensibilidad con los sectores afectados, siento una angustia y una bronca tremendas.

Entiendo que una actividad como la nuestra puede tener poco peso en las urnas, no lo culpo pero veo que el interés por el bienestar por la población, de las pymes y una mejor calidad de vida de de todos los santafesinos en este momento no está en la agenda”.

En contacto con la emisora, Sauán admitió que sintió “indignación” al ver los carteles callejeros pertenecientes a la campaña electoral, “en medio de la falta de respuesta del gobierno provincial que más nos puede facilitar cosas”. Para asombro del gastronómico, el domingo pasado recibió un llamado de Perotti que se extendió por media hora.

“Fue una charla sincera, tocamos varios puntos pero fue informal”, comentó. “El señor gobernador me preguntó puntualmente cuál era el problema pero acá el problema es general, de toda la actividad. Coincidimos en que la actividad más afectada fue la de fines ociosos pero, contrariamente, cerraron y reciben un subsidio y más o menos pueden aguantar la bocha. Pero a nosotros no y el reclamo no es por hoy sino todo el pasivo que se dejó estos 18 meses el negocio es deficitario dudo que haya”, precisó.

Luego, observó en relación a la situación de la gastronomía: “Estamos en Argentina, no pedimos subsidios pero sí asistencia que nos ayude con las deudas con los servicios o créditos blandos”, dijo y remarcó: “El slogan nuestro es compartamos los platos rotos”. Y, por otra parte, apuntó: “El Estado debe velar por las fuentes de trabajo, nunca pedimos nada, esto fue inédito en el mundo, es casi antiético que no haya una presencia fuerte estatal”.

Sauán consideró que Perotti se mostró interesado y empático con lo que le expuso en nombre del sector. También, deslizó que existe la posibilidad de que se extiendan la asistencia para el personal. “Me dijo que le sirvió la charla, estoy muy contento”, terminó.