La misión TESS de la Nasa descubrió un planeta caliente y rocoso que es aproximadamente un 50 % más grande que la Tierra. Clasificado como exoplaneta debido a su ubicación fuera de nuestro sistema solar, el objeto fue denominado TOI-561b.

El TOI-561b tiene tres veces la masa de nuestro planeta, pero la misma densidad. Tarda solo 10,5 horas en completar una órbita alrededor de su estrella anfitriona TOI-561, una enana naranja pobre en metales. Debido a sus características, el exoplaneta también se conoce como una "Súper Tierra".

De hecho, el exoplaneta fue descubierto por la misión TESS orbitando una de las estrellas más antiguas de la Vía Láctea. Su nombre, TOI-561b, deriva de TESS Object of Interest, U "objeto de interés de TESS" (TOI). Lanzada en 2018, esta misión escanea una amplia zona del espacio y monitorea las estrellas cercanas para buscar exoplanetas orbitando alrededor de ellas.

Luego, los investigadores usaron el Observatorio WM Keck DE Hawái para determinar la masa, el radio y la densidad del exoplaneta. El hallazgo se hizo público durante la 237 reunión de la Sociedad Astronómica Estadounidense, que se celebró en línea debido a la pandemia. El estudio aparecerá en la revista The Astronomical Journal en febrero de 2021, publicó RT.

"Uno de los planetas rocosos más antiguos"

Es importante señalar que la Vía Láctea se formó hace 12.000 millones de años y el Sol tiene solo 4.500 millones de años. Mientras tanto, los investigadores creen que los planetas del sistema solar de TOI-561 tienen alrededor de 10.000 millones de años.

"TOI-561b es uno de los planetas rocosos más antiguos descubiertos hasta ahora. Su existencia muestra que el universo ha estado formando planetas rocosos casi desde sus inicios hace 14.000 millones de años", explicó Lauren Weiss, becaria la Universidad de Hawái y autora del estudio. En ese sentido, Weiss afirmó que "este planeta se formó en un momento en que la mayoría de las estrellas de nuestra galaxia comenzaban a brillar".

¿Podría albergar vida?

TOI-561b probablemente no alberga vida actualmente. El planeta no solo orbita su estrella dos veces cada día terrestre, sino que pasa tan cerca que hace demasiado calor para que exista agua líquida en su superficie: tiene una temperatura superficial promedio de más de 2.000 °C.

De acuerdo con los investigadores, lo más probable es que TOI-561b sea una pista de que hay muchos más mundos rocosos aún por descubrir alrededor de las estrellas más antiguas de nuestra galaxia que podrían ser habitables y, por lo tanto, podrían albergar formas de vida muy antiguas.

Después de todo, se cree que las formas más antiguas tardaron al menos 1.000 millones de años en aparecer en la Tierra. Por lo tanto, cuanto más antiguo y estable sea el planeta, es más probable que albergue alguna forma de vida, según publicó Forbes.