El descenso de la temperatura anunciado para esta semana, después de las lluvias que calmaron la extensa ola de calor de mitad de enero, duró poco. Este jueves a las 17 chocó con una sensación térmica de 43,2 grados, la máxima del día, y emitieron un alerta por tormentas.

Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), la humedad estaba por encima del 60% y los 35 grados de temperatura se sentían mucho más pesados en la ciudad por la tarde.

El pronóstico oficial anuncia una probabilidad de “tormentas fuertes” en el marco de un alerta amarilla. En caso de concretarse, las lluvias podrían seguir el viernes, aunque con calor, ya que para ese día se anuncia una temperatura mínima de 24 grados y una máxima de 35.

Sábado y domingo pasarán entre nublados, calurosos, pegajosos y probablemente lluviosos o tormentosos. Para el sábado, se espera una máxima de 28 grados y tormentas aisladas hacia la tarde que se prolongarían durante la madrugada del domingo, para cuando el termómetro marcaría unos 30 grados de máxima.