El rosarino sobreviviente del atentado en Nueva York y la esposa de una de las víctimas pedalearon hasta la cima de una montaña francesa junto a otros 40 damnificados por atentados terroristas. El recorrido resultó casi tres horas y los protagonistas lo describieron como un trayecto "muy duro". 

Este jueves a las 10.30 de la mañana, Ana Evans, viuda de Hernán Mendoza, uno de los cinco rosarinos fallecidos en el atentado en Nueva York en 2017 y Ariel Benvenutto, sobreviviente del hecho, comenzaron a pedalear para llegar a las cima del Grand Colombier en Francia. La aventura forma parte de la tercera edición del evento “Together Stronger”, donde asociaciones de  víctimas de terrorismo de todo el mundo se unen para generar acciones de concientización. 

Dos de los tres argentinos listos para empezar a pedalear

Este año, la propuesta fue justamente ascender en bicicleta la cumbre del macizo del Jura, Grand Colombier, que tiene una altura de 1.534 metrso, como gesto de resistencia y para visibilizar un reclamo concreto: que los Gobiernos brinden apoyo económico a las víctimas y sus familias“En el atentado nuestro, no tuvimos ningún tipo de apoyo ni compensación del Gobierno argentino ni de Estados Unidos”, comentó Benvenutto desde Francia a Rosario3

Acompañado por su esposa y por la mujer de su mejor amigo, el rosarino comentó que se trató de un trayecto “bastante duro” ya que fueron 17 kilómetros a 1.400 metros de altura. “Había mucha gente de distintos países. Algunos iban en bicicletas adaptadas a las cuales todos ayudamos a subir, otros lo hicieron en bicicletas eléctricas pero yo opté hacerlo con bicicleta normal porque para mí era un desafío muy importante en honor a mis amigos”, apuntó. 

Luego de dos horas y media, los tres argentinos terminaron el recorrido. “La mezcla de sensaciones fue muy grande, tanto en lo físico como en lo emocional” , contó Benvenutto que además aseguró que ya en la cima, se abrazaron y “rompimos en llanto”.

“Ojalá esto sirva para concientizar que el terrorimo le puede pasar a cualquiera. Acá estamos en contacto con personas que han sufrido mutilaciones o lesiones psíquicas y es muy difícil cuando no se los apoya”, cerró el rosarino.