Las estaciones de servicio de Rosario, como en muchas otras ciudades del país, retomaron este sábado el suministro de combustible luego del faltante del viernes pero hacia la noche volvía a escasear. Estacioneros aseguran que se transita “un sendero hacia el normal abastecimiento” en todo el país, mientras el gobierno anunció que reforzó la importación.

Camiones cisterna recargaron las reservas de los establecimientos de la ciudad durante la madrugada y la mañana temprano, y rápidamente comenzaron a formarse filas de vehículos en las adyacencias de cada una. Por momentos de 20 metros, por otros, de más de dos cuadras.

Los playeros trabajaron sin descanso durante toda la jornada aunque muchos automovilistas advertían que hacia el anochecer ya se había terminado de nuevo la nafta en algunos lugares, mientras que otros vendían hasta 5.000 pesos por coche y había incertidumbre sobre si este domingo volverán a abastecer.

En este marco, desde la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (Cecha) aseguraron este sábado que se transita "un sendero hacia el normal abastecimiento de combustibles", tras el acuerdo del Gobierno con las operadoras petrolíferas para importar combustible.

En un comunicado, plantearon la necesidad de evitar la "catarsis colectiva" luego de la tendencia masiva de automovilistas de llenar sus tanques en las últimas horas.

La situación de "faltantes generalizados" de combustibles producida en las estaciones de servicio de todo el país, según Cecha por factores ajenos a la actividad, "tenderá a solucionarse progresivamente en los próximos días", precisaron.

Recordaron entonces los anuncios de que "el Gobierno ha comprometido la importación de diez barcos con combustible para paliar los faltantes producidos, habiéndose ya concretado la descarga de dos de las aludidas embarcaciones, y se encuentra ya en curso, la fase logística de su correspondiente distribución".

Desde el sector buscan llevar tranquilidad al consumo ante la proyección de importación de más combustible. (Ana Isla/Rosario3)

"De continuarse con el plan encarado, entendemos, de acuerdo a las previsiones del Gobierno y las petroleras, que esta situación tenderá a solucionarse progresivamente en los próximos días", confió Cecha.

Por eso, la entidad solicitó a operadores, actores económicos, formadores de opinión y, en especial, la ciudadanía "mantener la paz social en nuestras estaciones, evitando generar una catarsis colectiva, que solo redundaría en una mayor presión sobre los surtidores, dilatando el proceso de normalización que el sistema de expendio requiere".

"Nos conviene vender"

 

Más temprano, en Radio 2, desde la Federación Argentina de Expendedoras de Nafta del Interior negaron que el problema se trate de una especulación empresaria a la espera de algún aumento de precios

Si no se vende, es porque realmente no hay combustible. A los estacioneros nos conviene vender”, dijo Alberto Boz, presidente de la entidad, en elprograma Punto Medio.

Resulta que, según Boz, “el estacionero no puede especular por dos motivos: primero, porque su ganancia está en el porcentaje de las ventas. Y segundo, porque a los aumentos los autoriza el gobierno. Y vienen siendo del 4% mensual. Eso es mucho menos que la rentabilidad por ventas que tiene una estación, que ronda el 9 por ciento".

"Por eso -redondeó el dirigente- conviene toda la vida seguir vendiendo y no especular con un aumento que encima nunca se va a autorizar en porcentajes adecuados para lo que necesitamos. Entonces, el estacionero lo que quiere es tener combustible para vender”.