Rosario vivió un nuevo fin de semana violento con cinco homicidios ocurridos en pocas horas. Pero además de las víctimas fatales hubo también personas que sufrieron heridas de arma de fuego y tuvieron que ser asistidas en distintos efectores de salud de la ciudad.

Uno de los casos más resonantes es el del comerciante que quiso enfrentar a delincuentes que intentaban robar una granjita en la zona de Cochabamba y Perú. Si bien logró su cometido, ya que los ladrones no pudieron ingresar al local, la represalia fue un tiro en la espalda que le afectó la médula.

El otro hecho violento que generó conmoción el fin de semana tiene que ver con una chica de 13 años que fue herida de bala en su boca. El episodio ocurrió en la tarde del sábado en la zona de Siripo al 1400 cuando al menos dos delincuentes pasaron en moto y asesinaron a disparos a Nicolás Gálvez de 27 años. 

Una de esas balas impactó en la mandíbula de la menor que se encontraba en la zona y fue trasladada de urgencia al Hospital Alberdi donde le realizaron las primeras curaciones. Una vez que fue estabilizada la trasladaron al Provincial donde permanece internada.

“Ingresó el sábado a la madrugada, en el Alberdi le retiraron el proyectil y la derivaron para poder realizarle la sutura del labio y la lengua ya que la bala había ingresado por la cavidad oral”, relató en Cada Día (El Tres), la vicedirectora del Provincial, Noelia Bottassi.

De acuerdo a la profesional, afortunadamente el proyectil no generó mayores complicaciones por lo que la chica se encuentra estable y se recupera. “La bala quedó alojada en tejidos blandos de la lengua y el labio. Tal vez si hubiese sido sobre el piso o techo de la boca hubiese causado otro tipo de daños”, analizó.

“Lo importante era realizar la sutura y aplicar una buena limpieza del lugar. En estas primeras horas estamos evaluándola mientras le pasamos antibióticos para evitar infecciones secundarias por la herida de arma de fuego”, añadió la médica.

Mientras se recupera, tanto la chica como su familia se encuentran asistidas por un equipo interdisciplinario del hospital. “Podríamos estar hablando de una tragedia, en este caso no sucedió, pero podría haber sido”, concluyó Bottassi.