La mañana del viernes santo ofreció un dibujo en el cielo que llamó la atención de los rosarinos. Una cruz, un signo igual y un corazón en lo alto de la ciudad pintaron una escenografía poco habitual. El responsable se llama Emanuel Astesano, un piloto de avión que, por encargo de una iglesia evangélica, surcó los cielos de San Lorenzo y llegó hasta Rosario haciendo piruetas.

“La iglesia me envió un modelo de lo que querían hacer y traté de hacerlo lo más parecido posible”, dijo en De 12 a 14. Y agregó: Es prácticamente imposible saber cómo sale allá arriba: me hice un dibujo y me lo memoricé. No supe que había quedado bien hasta que no llegué a casa”.

Emanuel contó que hace 20 años es piloto pero este pedido lo sorprendió: “Lo mío no es escribir en el cielo. Me dedico a la acrobacia, pero para mí escribir es algo nuevo”.

El piloto contó en El Tres que el dibujo fue hecho a 10 mil pies de altura porque las condiciones son más propicias para que el dibuje permanezca por más tiempo en el aire: “El vuelo es sencillo, pero lo difícil es que las condiciones de la atmósfera aguanten para poder hacer el dibujo. Con más temperatura se disipa más rápido el humo”.

Finalmente, Emanuel expresó que repitió el dibujo y las piruetas tres veces: “Lo hice en El Campo de la Gloria, en la Florida y en el Monumento”. Y si las condiciones climáticas lo dejan, el domingo de pascuas lo volverá a hacer.