El intendente Pablo Javkin repudió el crimen del joven Joaquín Pérez en Arroyito en ocasión del robo de su auto, hecho que calificó de "sangriento e injusto", y aseguró: "A estas cosas no nos podemos acostumbrar".

Javkin dijo que tomó "contacto con familiares" de la mujer de la víctima fatal, con quien tenía una nena de 2 años, y descartó cualquier hipótesis ajena a un robo. "Acá no hay ningún arma que haya estado en el auto de Joaquín, es un hecho tremendo, una persona que directamente lo asesinó", afirmó.

El intendente pidió presencia policial en las calles a toda hora para que "estas cosas no pasen" y dijo conocer los reclamos de la seguridad del barrio. "Estamos trabajando en la iluminación", afirmó sobre el accionar municipal.

"Estas cosas sudecen porque hay una posibilidad que suceda", aseguró y lamentó la pérdida del joven arquitecto de 34 años para su familia, amigos y vecinos: "No tiene ningún atenuante en el dolor, acá no hay ningún atenuante". Incluso recordó la historia de resiliencia de Joaquín que había perdido a sus padres.

"A estas cosas no nos podemos acostumbrar, acá no hay ningún enfrentamiento de bandas ni nada que tenga que ver con las actividas ilegales", diferenció Javkin sobre las características de la mayoría de los homicidios que se dan en la ciudad.

El intendente definió el crimen como un hecho "sangriento, injustificado que aruina la vida de una familia". Habló del fin de una vida de forma impune "porque tampoco hay una persecución" de los criminales y fue "sin sentido porque ya apareció el auto", que habría sido el supuesto motivo del asesinato. "Nos tienen que cuidar más", agregó.