El ministerio de Educación de La Pampa decidió eliminar la figura tradicional del abanderado, por considerar que había que suprimir ese "privilegio" y con el fin de que no solamente tenga la posibilidad de portarla "un grupo reducido de alumnos".

Según las autoridades, la medida responde a "la desigualdad de aprendizaje" y a las dificultades para elegir abanderados y escoltas que quedaron evidenciadas a lo largo de la pandemia de coronavirus, además de fomentar un "paradigma inclusivo".

En consecuencia, los alumnos ya no deben obtener el mejor promedio para portar la insignia nacional o provincial. La subsecretaria de Educación pampeana, Marcela Feuerschvenger, dialogó con medios locales y afirmó que "todos los estudiantes tienen derecho de estar en la bandera".

La funcionaria dijo que designar abanderados forma parte de "rituales muy instalados en las escuelas".

"Nos identifica a todos. El objetivo es que todos los alumnos estén con la bandera, no solo un grupo", añadió la funcionaria. De esta forma, cada "institución puede decidir que a la bandera nacional o de La Pampa en un acto la lleven unos alumnos y en el siguiente otros distintos", planteó a La Arena.

En la misma línea, Feuerschvenger señaló: "No estamos diciendo de no portar el símbolo, pero no con criterios de mejor promedio porque somos conscientes de los contextos de desigualdad de aprendizaje. En un paradigma inclusivo, cada uno tiene un valor para dar y todos tienen el derecho de portar la bandera".

De todas formas, dijo que designar abanderados forma parte de "rituales que están muy instalados en las escuelas, que son históricos" y que por ello respetarán "los tiempos porque está arraigado socialmente".

"A partir del contexto de pandemia y teniendo en claro que las condiciones de aprendizaje son diferentes, en el año 2020 no tuvimos a los abanderados en la escuela primaria como prioridad para el ingreso al nivel secundario, es decir que no se les entregó la constancia. En el 2020 sacamos ese requisito y en el 2021, más allá de que volvimos a la presencialidad, mantuvimos esta decisión", explicó la subsecretaria de Educación pampeana.

Evaluación formativa

Con respecto a los métodos de evaluación en general, la funcionaria sostuvo: "En el nivel secundario lo que definía era la nota y la nota sigue estando pero al final del ciclo. La evaluación ciclada o formativa es la evaluación procesual, es la construcción del conocimiento de forma permanente, todos los días, donde se van viendo los procesos de aprendizaje del alumno".

En ese sentido agregó que se "requiere de un fuerte trabajo del docente porque hay que analizar día por día" el desempeño y la participación de los alumnos. Además, explicó que, por este motivo, durante este año se realizaron capacitaciones a directores de colegio y asistentes pedagógicos.

"Lo que estamos proponiendo es una evaluación permanente, continua porque significa reorganizar los saberes dentro de un ciclo básico u orientado, con propuestas interdisciplinarias que impacte en mejores aprendizajes en los alumnos", agregó.