Después de que el Concejo Municipal anunciara que pretende declarar como visitante distinguido a L-Gante y se desatara la polémica, el secretario de Cultura, Dante Taparelli, fue consultado al respecto y dio su parecer: Lo que tenemos que hacer como sociedad acomodada es escuchar lo que dicen”, dijo en Radio 2. Y agregó: “Por ahí escuchándolos hasta encontramos la llave a la inseguridad”.

En diálogo con el programa AM/PM, que conduce Pablo Montenegro, dijo: “Este chico es el representante de un grupo enorme de excluidos. De golpe aparece con una expresión artística, lo rodean miles de pibes que viven su misma situación y lo toman como alguien que dice lo que ellos no pueden decir”.

El funcionario no quiso entrar en polémica sobre la distinción o no del artista, sino que expresó sus argumentos respecto de la necesidad de observar lo que pasa con este nuevo movimiento: "Es indiscutiblemente un emergente de la cultura contemporánea. Paso de la nada, del hambre a sentarse con Mirtha Legrand. El tema de distinguirlo o no es una cuestión de los concejales, pero es evidente que es un emergente cultural".

“Hasta su nombre, L-Gante, es un hecho artístico. ¿Vieron a alguna persona que viva en un barrio irregular a la que se la considere elegante?, se preguntó el funcionario”. Y agregó: “Hasta eso tiene un guiño con el arte. Lo que tenemos que hacer es analizar lo que dice, sobre todo los que comemos cuatro comidas al día”, indicó Taparelli.

El secretario de Cultura comparó este nuevo movimiento con otros surgidos como una voz de protesta: "Cuando surgió la cumbia villera también fue una manifestación artística, una manera de decir, son los cantos de protesta de los 70, pero con otra estética, otros instrumentos y otras vivencias. Estos pibes nacieron en tiempos de hambre, desocupación y exclusión, ¿qué pretenden que hagan?. Hay que agradecer al cielo que en vez de agarrar un arma se pongan a hacer música".

Más tarde, describió: "Detrás de él, hay un montón de pibes que quieren ser como él, que quieren poder expresar lo que les pasa y que los valoren por eso".

Además, indicó que su postura es potenciar esas voces: “Yo creo que cualquier expresión artística debe ser apoyada hasta las últimas consecuencias. Lo último que hay que hacer es juzgar. Lo que sí hay que hacer es impulsar”.

Finalmente, sentenció: "Lo que tenemos que hacer como sociedad acomodada es escuchar que dicen y por ahí escuchando hasta encontramos la llave a la inseguridad".