El intendente de la ciudad balnearia de Villa Gesell, Gustavo Barrera, decretó una prohibición al consumo de bebidas alcohólicas en la calle, playas y otros espacios públicos, tras el crimen de Fernando Báez Sosa, cometido el sábado último, a la salida de un boliche. 

La resolución, que prevé multas de hasta 34.450 pesos, entrará en vigencia una vez que sea aprobada por el Concejo Deliberante, donde cuenta con quórum propio.

El decreto con fecha de este miércoles 22 de enero, al que tuvo acceso Télam, especifica en su primer artículo que se prohíbe "el consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública, playa, espacios públicos, interior de estadios polideportivos, u otros sitios de igual naturaleza, cuando se realicen en forma masiva actividades deportivas, culturales, educativas y/o artísticas".

Asimismo, el documento establece que "se extiende la prohibición al expendio de bebidas alcohólicas mediante máquinas expendedoras automáticas (…) y al consumo de bebidas alcohólicas dentro de vehículos automotores, públicos y/o privados, aún cuando quien consumió no fuere el conductor y se halle o no circulando".

Según la normativa, las multas por violaciones a lo dispuesto serán de hasta cinco mil mult (unidad de medida del municipio que equivale a 6,89), por lo que, de máxima, se deberán abonar 34.450 pesos.

Voceros del municipio explicaron que el intendente Gustavo Barrera deberá enviar el decreto con su firma al Concejo Deliberante gesellino –en el que cuenta con quórum propio– con un pedido de sesión extraordinaria.

Una vez recibida la resolución por el presidente del Concejo Deliberante, tendrá un mínimo de 48 horas hábiles para habilitar la sesión, por lo que el documento podría ser tratado recién a partir del próximo viernes por la tarde.

Con la sesión extraordinaria habilitada el decreto se pondrá a referendo de los concejales y será aprobado sin inconvenientes, quedando firme la resolución firmada por el intendente del municipio.