Los eventos extremos combinados sobre el fin de año -rebrote de casos de coronavirus, bajante del Paraná, ola de calor e incendios en las islas- modificaron la relación de los rosarinos y las rosarinas con el uso y disfrute del río Paraná, las playas y las islas.

Desde La Florida, el jefe de guardavias, Leonardo Manino, aseguró en De 12 a 14 (El Tres) que volvió la delimitación de búrbujas para evitar contagios con círculos sobre la arena.

A su vez, la retirada del agua de la costa hizo que haya mucho espacio de playa para cumplir con los cuidados sanitarios y las distancias. Lo propio ocurre en la Rambla Catalunya, el balneario público que lucía descuidado y con falta de mantenimiento.

En paralelo, ese mismo fenómeno por la falta de lluvias y sequía prolongada genera dificultades y problemas en la navegación, sobre todo en las embarcaciones a motor.

Por eso, el guardavidas pidió reducir la velocidad y estar alertas al cambio de profundidad en las aguas ante la formación de bancos de arena. También asoman estructuras que estaban bajo el cauce y quedan cerca de la superficie, como caños, hormigón, muelles, entre otros. “El mapa naútico es otro”, definió.

A ese escenario se suma que se detectaron ataques de palometas en los últimos días en la costanera rosarina por el mismo combo de calor y bajante.

“No se espera un repunte del Paraná”

 

El director de Defensa Civil, Gonzalo Ratner, advirtió sobre la bajante: "El INA (Instituto Nacional del Agua) emitió los pronósticos a mediano plazo, incluso hasta fin de febrero, con un Paraná en niveles extremadamente bajos. No se espera un repunte, que llegue a niveles de normalidad en los próximos meses. Por eso vamos a transitar un verano con un río que oscila en valores cercanos a cero, con algunos repuntes momentáneos pero difícilmente alcancemos valores normales".

"Con esta condición declarada para todo el verano, las principales recomendaciones para quienes visiten el río es bañarse en aguas permitidas, que estén dentro del boyado y con presencia de guardavidas, por lo cual tienen que ser en el horario que funciona el servicio de guardavidas. Hay que recordar que bañarse en lugares que no estén permitidos genera un riesgo muy grande porque en este momento a poca distancia de la costa se encuentran grandes profundidades", agregó como recomendación para bañistas.

Y para quienes naveguen en el río, Ratner destacó: "Hay que mantener las medidas de seguridad habituales, el uso de los elementos correspondientes, tener el chaleco salvavidas siempre puesto, tanto las embarcaciones a remo como con motor, pero en este caso particular, el consejo es manejar a una velocidad prudencial, no a altas velocidades y tampoco tan cerca de la costa, para no encontrar bancos de arena o troncos de árboles, que habitualmente no están en ese lugar pero a causa de la bajante empiezan a aparecer y generar riesgo".

Recomendaciones específicas

 

Buenas prácticas para la convivencia en el río para bañistas:

Respetar los horarios y los lugares designados para bañarse, donde haya delimitación en el agua y con presencia de guardavidas.

Con los más pequeños, siempre recordar tenerlos en supervisión directa y a corta distancia así sea en la playa o en cualquier lugar en el río.

Evitar el consumo de alcohol ya que expone a tener una mayor probabilidad de ahogarse.

Ante una evacuación de la playa por alertas o tormentas eléctricas seguir las recomendaciones de los guardavidas y de los agentes de control por su seguridad.

Si se ve a alguien en peligro, no arrojarse a ayudarlo. Llamar al 106, Emergencias Náuticas y arrojarle un elemento flotante para evitar la sumersión.

Estar preparado ayuda y mucho, se recomienda realizar los cursos de Capacitación a la Comunidad que dicta Defensa Civil con el fin de poder instruirse en RCP y otros conocimientos prácticos para responder frente a una emergencia.

Buenas prácticas para la convivencia en el río para embarcaciones:

Llevar documentación de embarcación a los fines de poder presentársela a los prefectos que se encuentran realizando los controles de rutina.

Navegar con la velocidad mínima necesaria para trasladarse, a efectos de contemplar los bajos fondos existentes en este contexto de bajante extraordinaria.

Que las navegaciones no superen las capacidades de tripulantes por embarcación.

La navegación en el canal es exclusiva para buques mercantes, restringidos por su calado.

Las embarcaciones menores, de menos de 20 metros de eslora, deben sí o sí navegar fuera del canal de navegación respetando las demás embarcaciones menores que navegan cerca de la costa y respetando la distancia de los boyados de cada sector de balnearios.

Se recomienda el uso de chaleco salvavidas reglamentario.

Es importante recordar los números de los servicios en casos de emergencia: SIES 107, Defensa Civil 103, Emergencias Náuticas 106.

Además, el municipio cuenta con un Manual de Buenas Prácticas en el río, que fue elaborado de manera conjunta con asociaciones y usuarios. El Manual cuenta con información detallada y específica respecto de navegación en distintos tipos de embarcaciones, instrucciones de respuesta ante las situaciones de riesgo más frecuentes, primeros auxilios y seguridad náutica.

Acampe en zona de islas

 

Cabe destacar que cuando se acampa o se visita la isla y sus zonas de playa, se debe traer embolsada toda la basura que se pudo haber producido y arrojarla en los cestos correspondientes en tierra firme. Asimismo, se aconseja a los campistas no prender fuego o hacer fogatas en zonas no habilitadas y siempre recordar apagar cualquier remanente de fuego para evitar incendios.