Aunque por ordenanza municipal está prohibida la comercialización y uso de fuegos artificiales, antes y después de la medianoche el cielo rosarino se tiñó de vibrantes colores. Pero, a diferencia de la Navidad pasada, este 2016 se registraron muchos menos heridos por pirotecnia. La Nochebuena 2015 se habían contado 12 y esta vez, cinco. El número se mantuvo similar al del Año Nuevo 2016 cuando se registraron cuatro heridos.

Consultada por Rosario3.com, la subsecretaria de Salud Municipal, Silvia Marmiroli, precisó que los cinco lesionados este año tienen heridas menores y no requirieron de internación por lo que pronto, tras una rápida curación fueron dados de alta y pudieron regresar a sus hogares para continuar los festejos.

De los cinco, tres eran niños rosarinos de entre tres y diez años. 

Para la funcionaria esto revela una mayor concientización sobre el uso de fuegos artificiales.