La Cámara de Supermercados de Rosario evaluó la situación que los consumidores viven a diario: la falta de leche y en particular, la imposibilidad de optar por las marcas que hasta hace pocos meses compraban, aunque el secretario de Agroindustria haya expresado este martes, en su visita a San Lorenzo, que “no es cierto que esté faltando leche en la Argentina”.

“Tal como venía pasando en enero y se profundizó aún más en febrero y marzo, el problema de la falta de leche tiene varias aristas y que ataca especialmente al sector primario, a los productores tamberos que padecen una rentabilidad deficiente”, explicó en diálogo con el móvil de El Tres, Juan Manuel López Raído, titular de la Cámara de Supermercados.

 

“A esto –agregó– hay que sumar situaciones climáticas como inundaciones y sequías que causaron una contracción del sector. En 2018 cerraron 750 tambos en toda la cuenca lechera y aunque el precio del litro de leche se había aumentado al tambero, hoy no brinda la rentabilidad que en otros momentos tuvo”.

El dirigente señaló que en Argentina se mantiene la misma producción de leche per cápita de la década del '90, aunque la cantidad de la población argentina aumentó, y brindó una explicación sobre el cambio en la oferta de productos: “Respecto a la industria, sabemos que también hubo una modificación en relación con los tipos de leche que se lanzaron al mercado. En un momento, las segundas marcas estaban por encima de las primeras y hoy la situación se revirtió. Esto se debe a que las empresas notaron que tenían baja rentabilidad –dado que el consumo se había movido hacia las marcas de precios más bajos– y ellos tenían el control de precios para esas primeras marcas”.

Por último, López Raído sostuvo que “la leche tiene una demanda constante y no hay ningún tipo de stock por parte del supermercado. La gente viene y se lleva lo que encuentra en la góndola”.