En la presentación de Showmatch del lunes a la noche, Marcelo Tinelli habló sobre el percance que sufrió en su último programa cuando se le cerró el pecho, se quedó sin voz y tuvo que ser reemplazado por Moria Casán.
"Estoy muy bien, me cuidé bastante todo el fin de semana y descansé. Me asusté mucho, ni yo me daba cuenta qué era lo que realmente me estaba pasando. No me salía la voz, quería hablar y se me cerraba la garganta. Me empecé a desesperar porque nadie se acercaba, necesitaba que alguno hablara, agarrara el micrófono y siguiera para adelante", explicó Tinelli.
En su apertura también agradeció la actitud de Moria para salir “al toro”. "Es una diosa, una lady. Más allá de la amistad y la admiración profesional que le tengo, que haya agarrado el micrófono en ese momento me dio una gran tranquilidad", señaló.
Con respecto a como vivió el momento, el conductor del ciclo de mayor éxito de la televisión argentina dijo que pensó en un momento mandar a un corte “pero se me cerró la garganta. Tragué saliva y me dije acá sigo, pero no salía la voz. Transpiraba mal, nunca me había pasado una cosa igual. Me ahogaba, no podía tragar y me empecé a desesperar".
Mientras la One llevaba adelante el Bailando, Tinelli contó que se quedó al costado de la pista: "Me quedé sentado en un parlante al costado pensando que iba a volver, pero me costaba mucho. El médico me dijo que vayamos al camarín y me dio una pichicata. El corticoide y el remedio que tomé el fin de semana me hicieron muy bien, pero me tengo que cuidar y no gritar mucho porque cuando me voy muy arriba, podría quedarme sin voz".
De ahora en adelante, Tinelli deberá ser más cuidadoso y tendrá que tomar algunos recaudos por consejo médico: "Voy a tratar de regular, pero en un tono arriba. Voy a ir viendo cómo me siento, de ánimo estoy mejor. Por las dudas, que Moria esté preparada”, concluyó.
