Axel Uriel L., un adolescente de 16 años conocido como Monito, fue detenido en la madrugada de este martes en una vivienda de barrio San Martín Sur. El chico está acusado de haber participado de un ataque a balazos con intención de matar a una mujer y su hija embarazada el pasado 5 de septiembre en barrio Magnano del extremo sur de la ciudad.

Monito fue detenido en un allanamiento encabezado por la División Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) en calle Arequito al 800, cercano al cruce de San Martín y Circunvalación, indicaron voceros de la fuerza. De la irrupción también participaron grupos tácticos. El chico quedó a disposición del Juzgado de Menores para ser indagado.

Esta detención se sumó a la Ezequiel Mauricio “Chapu” F., señalado como el cómplice de Monito en acto criminal que, según se ventiló, tenía como objetivo vengar la muerte de Jonatan Schneider, quien fue emboscado el 4 de septiembre en una plazoleta de pasaje 544 al 6600, casi Circunvalación, ocasión en que quedó en la línea de fuego la vecina Graciela Carrizo, quien falleció por múltiples impactos frente a sus nietos.

El 5 de septiembre a las 19.30, Paula y Tamara salieron de su domicilio en calle 525 al 600 para hacer unos mandados. Hicieron unos metros y de abajo de un túnel aparecieron “Chapu” y el menor apodado “Monito”, ambos a pie y con una pistola 9 milímetros cada uno. Sin mediar palabra alguna, la dupla disparó sobre las mujeres y salió de escena “hacia el lado de San Martín al fondo”, señaló el fiscal Gastón Ávila al acusar a Chapu, quien quedó detenido por el plazo de ley.

Paula fue derivada al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) donde estuvo internada 11 días con con lesiones en el pulmón, hígado, intestino, corazón y cólon. Su hija Tamara estuvo cinco días en terapia intensiva en el Hospital Provincial, continuó con el embarazo –el bebé resultó ileso– y le dieron el alta a fines de septiembre.

Las declaraciones de las víctimas y de algunos allegados señalan que las mujeres fueron baleadas sólo por el hecho de ser familiares de Diego Aguirre y de Miguel Ángel “Ojudo” López, quienes se encuentran en prisión preventiva como sospechosos de haber matado a Jonatan Schneider y a Graciela Carrizo 24 horas antes.

Graciela quedó en la línea de fuego cuando atentaron contra Schneider, el crimen que motivó la venganza contra Paula y Tamara. Foto: Alan Monzón/Rosario3

“El conflicto viene hace años entre los parientes de Jonatan Schneider con Miguel Ángel López (apodado “Ojudo” y preso desde el 19 de septiembre). Creo que uno quería ser más que el otro, no sé si es por droga, como si fuese un conflicto vecinal”, señala uno de los testimonios. Schneider, según la causa, era tío del ahora detenido Axel alias Monito.