Allurion, el programa que revoluciona la forma de bajar de peso en Argentina es un plan integral de vida saludable que permite adelgazar en promedio entre el 10 y el 15 por ciento del peso corporal en solo 6 meses, a través del balón gástrico ingerible. Se coloca de manera ambulatoria en aproximada de 20 minutos, sin cirugía, endoscopia o anestesia. Produce sensación de saciedad y lo utilizan como herramienta inicial de quienes desean un cambio en su vida sostenido en el tiempo. En el mundo, ya se han colocado más de 100 mil balones y en Argentina, la cifra supera los 2 mil balones.

“El Programa incluye el balón gástrico ingerible, sumado a herramientas digitales de seguimiento continuo; una balanza inteligente, un reloj Health Tracker (rastreador de salud) y asistencia del equipo multidisciplinario, que es el inicio para quienes deseen un cambio sostenido en el tiempo. El Balón Allurion no es solo un balón ingerirle, es un Programa Integral que ayuda a las personas a cambiar su estilo de vida y a desarrollar hábitos más saludables” subraya Diego Awruch , cirujano bariátrico especialista en obesidad, co-director del Centro de cirugía bariátrica y metabólica del Sanatorio Británico de Rosario.

El especialista destaca “el sobrepeso y la obesidad deben ser abordadas desde una visión global, con un equipo multidisciplinario para lograr abarcar este problema en toda su complejidad. En este contexto el programa Allurion ha sido una gran herramienta para potenciar sus resultados de pérdida de peso y de estilo de vida saludable. Es importante conocer que el 80 % de la pérdida de peso con un balón se produce en los 3 primeros meses”.

“El programa comienza con la consulta junto a un equipo multidisciplinario, en el que intervienen médicos especialistas en nutrición, psicólogos especialistas en el trastorno de la conducta alimentaria, y un equipo quirúrgico certificado por Allurion que evalúa de manera integral al paciente para la colocación del novedoso balón gástrico”, destaca Awruch

El programa de Allurion tiene cada vez más adeptos ya que sus resultados son comprobados y su colocación no necesita ningún tipo de hospitalización. Es ideal para pacientes con un IMC superior a 27, este es el requisito más importante. También podrían ser candidatos pacientes con obesidad grado 1- 2 o grado 3 que no pueden bajar de peso con un tratamiento médico clínico, y que necesitan bajar ese 10% que los cirujanos bariátricos necesitamos para llegar en forma segura a la cirugía”.

El proceso se realiza en una sala de rayos X. El paciente ingiere con un poco de agua una cápsula que contiene en su interior el balón gástrico y que va unida a un fino catéter, que se retira una vez completado el proceso de llenado del mismo. “Para este procedimiento, no es necesario realizar ninguna sedación, ni endoscopia para introducir el balón en el estómago, simplemente se realiza un control radiográfico para verificar su correcta ubicación. Una vez ingerida la cápsula, al llegar al estómago, se procede al llenado del balón con 550 cc de líquido. El balón dura en el organismo 4 meses y después de este tiempo una válvula de descarga permite que se vacíe para la eliminación del balón de forma natural”, describe Awruch, quien junto a su equipo implantaron más de 50 balones.