El mundo del arte encontró una nueva forma de comercializar obras a través de la tecnología Blockchain. La misma es definida por los expertos como una estructura matemática en la cual es posible almacenar datos resultando casi imposible de falsificar.

Artistas como The Weeknd, Kings Of Lion Gorillaz han presentado colecciones de arte digital, y, así como ellos, otros han llegado a vender obras por grandes montos que hicieron que la atención vire inmediatamente allí a ver qué es lo que está pasando con todo este fenómeno, un verdadero trending topic.

Este NFT corresponde a un collage digital del artista Beeple que se vendió en 69,34 millones de dólares (adslzone.net)

CriptoArte

Tal como su nombre lo sugiere, refiere al arte digital encriptado. Esto se logra por medio de operaciones digitales y, a raíz de la tecnología Blockchain, se comenzó a comercializar. 

En este nuevo mundo, cada obra es traducida a un NFT o "token no fungible", es decir, un código único e irremplazable. Al obtener la propiedad de ese NFT, la obra puede ser comercializada. 

Para lograr esto, las y los artistas deben convertir su obra en NFT a través de una plataforma, aunque, previamente, deben contar con una billetera virtual o wallet para poder realizar transacciones desde la virtualidad y con este dinero diferente.

Si bien existen varias, la criptomoneda más utilizada para las piezas artísticas es el Ether, dentro del blockchain Ethereum. Para ello, se deben cambiar pesos para transformarlos en Ethereum (a través de casas de cambio) y luego se crea lo demás. Para que todo esto se ponga en marcha, existe una energía que debe comprarse, con un costo de entre 40 y 100 dólares. 

Por otra parte, es importante resaltar que cualquier persona puede tokenizar una imagen, aunque eso, por supuesto, no convertirá a cualquier persona en artista ni todo comenzará a ser valorado como una obra de arte.

Como ejemplo, en Argentina, el diseñador de interiores Andrés Reisinger, pasó de trabajar para empresas nacionales a crear NFT de sofás, sillas y mesas digitales, obteniendo ganancias de casi medio millón de dólares en sólo minutos. Así, se convirtió en uno de los artistas menores de 30 años más destacados en el área del arte y diseño, según la revista Forbes.