Ganando popularidad entre un público cada vez más joven hay un fervor general alrededor de la comida y el vino que siguen atrayendo a gente de países, culturas y edades que hasta hace poco no estaban especialmente interesados en ellos.

 

Cada vez hay más espacios son los que hacen eco, ofrecen  paquetes y amplifican esta tendencia. Los operadores turísticos se están emparejando con chefs y productores locales de alimentos para atraer a los viajeros a descubrir la cocina del destino.

 

Esta tendencia sigue creciendo a lo largo del globo, a través de las redes sociales, y ya hay lugares en donde la mayoría de los jóvenes se rige por los comentarios de sus pares para saber dónde se ofrecen las mejores experiencias foodies. Según la Asociación Nacional de Restaurantes de Estados Unidos, el 70% de los milenials tiene en cuenta a los proveedores locales a la hora de decidir dónde comer. El sector se encuentra en una posición privilegiada para dar a conocer a los productores locales y brindar a los huéspedes el acceso a disfrutar de experiencias únicas.

 

Fuente: hosteltur.com