El perfume es mucho más que un accesorio invisible: es una forma de expresar personalidad, generar recuerdos y acompañar momentos. Sin embargo, muchas veces su duración en la piel parece efímera y desaparece antes de lo esperado. Para evitarlo, existen pequeños trucos que pueden marcar la diferencia.
Tips para que el perfume dure todo el día
Uno de los principales consejos es aplicarlo en los puntos de pulso, como muñecas, cuello y detrás de las orejas. Estas zonas emiten calor de manera natural, lo que ayuda a difundir la fragancia a lo largo del día. También es recomendable hidratar bien la piel antes de la aplicación, ya que las lociones o cremas sin aroma generan una base que retiene mejor las notas olfativas.
Otro tip clave es evitar frotar las muñecas tras rociar el perfume. Aunque sea un gesto automático, este hábito rompe las moléculas de la fragancia y reduce su intensidad. En cambio, lo ideal es dejar que se seque de manera natural para mantener intacta su composición.
Finalmente, no hay que olvidar el cuidado del frasco. Guardar el perfume en lugares frescos y secos, lejos de la luz directa y el calor, garantiza que la esencia no se altere ni pierda potencia. Así, con simples ajustes en la rutina diaria, el aroma elegido podrá acompañar desde la mañana hasta la noche.



