El conflicto en la cerrada aceitera Buyatti, en Puerto General San Martín, puede escalar llegando a un paro generar que paralice a todas las aceiteras del Gran Rosario, posibilidad que encendió la alerta en las empresas del sector.

Desde hace unos días, un piquete mantiene cortado el acceso a la planta de Buyatti y complicando el tránsito de camiones por la zona. Los empleados de la aceitara, que está cerrada desde finales del año pasado, piden que se den marcha atrás con unos 30 despidos, sobre todo porque –denuncian- las indemnizaciones que ofrecen son un 50% menos de la que les corresponden. La novedad es que ahora las bases sindicales le están pidiendo a la cúpula del Sindicato Aceitero de San Lorenzo que active un paro total en todas las aceiteras.

Esa posibilidad de bloqueo a plantas y puertos despertó mucha preocupación en la industria aceitera, ya que en marzo empieza a arribar la cosecha gruesa nueva. “Solicitamos a los Gobiernos nacional y provincial garantizar la libre circulación de camiones y el flujo del comercio exterior”, señaló un comunicado conjunto de la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (Cec).

“Es crítico en estos momentos asegurar que los principales puertos e industrias de la agroexportación del país puedan operar en este momento en Puerto General San Martín, con la llegada de cada vez mayor cantidad de camiones. Es vital para el normal ingreso de divisas”, señalaron.

Por eso, el sector pide a las autoridades intervinientes la máxima atención y urgente focalización en resolver la amenaza de un paro en esa región, que podría paralizar la totalidad de la actividad industrial y portuaria, más allá de la agroindustrial”, agregaron.

Buyatti está paralizada luego de que la defaulteada Vicentín dejara de operar sus plantas. La empresa, que básicamente es una proveedora del servicio de crushing para terceros, buscó a otras firmas para alquilar instalaciones, pero la alta capacidad ociosa le complicó la ecuación. En la actualidad, la empresa –de capitales regionales y que no es parte del grupo Vicentín pese a estar bajo control de una rama de la familia Buyatti- está a la venta pero con dificultades de encontrar comprador. Sin actividad, la empresa sostiene que no le queda otra alternativa que achicar el plantel de empleados.