El Bayern Múnich se coronó campeón del Mundial de Clubes tras derrotar por apenas un gol al Tigres de México en la final del torneo disputada este jueves, en el Education City Stadium de Qatar, igualando así el famoso "sextete" que solo el Barcelona de Guardiola había alcanzado en 2009. 

El trofeo de la Copa Mundial de Clubes se sumó al de la Bundesliga que ganaron por 13 puntos de diferencia con su perseguidor, la Copa de Alemania (4-2 en la final al Leverkusen) y la Champions que consiguió el 23 de agosto ante el PSG. 

A la lista de triunfos del conjunto alemán también se suman la Supercopa de Europa, con el gol de Javi Martínez en el alargue para doblegar al Sevilla, y la Supercopa de Alemania con el vibrante 3-2 ante el Dortmund.

El Bayern Múnich jugó con bajas importantes como las de Jerome Boeteng y Thomas Müller.

Si bien los Bávaros dominaron el balón, tuvieron dificultades a la hora de generar situaciones debido a la ausencia de dos referentes, como el defensor Jerome Boeteng, quien regresó a Alemania por razones personales, y el mediocampista Thomas Müller, quien dio positivo en su último test de covid-19.

El VAR anuló un gol de Robert Lewandoski.

Tras un primer tiempo sin goles, en el que el VAR tuvo que intervenir correctamente para anular por fuera de juego de Robert Lewandoski una acción que había terminado en gol de Joshua Kimmich, la emoción llegó en el complemento.

El marcador se rompió a los 15 minutos de la segunda mitad gracias a un centro frontal para Lewandowski que exigió la salida apresurada de Nahuel Guzmán.

El balón pegó en ambos y, tras una carambola, quedó servido para Pavard quien en el área y sin resistencia definió sin inconvenientes, pero entonces volvió a intervenir el VAR. 

En una acción poco comprensible, y desoyendo los consejos de la FIFA, el juez de línea levantó la bandera en plena celebración para indicar una supuesta posición adelantada del polaco, aunque el VAR intervino para marcar el error del asistente y convalidar el tanto.

Tigres lograba respirar cuando la pelota pasaba por los pies de Gignac, el francés con 147 goles en 246 partidos en el equipo, que bajaba a pivotear y hacía jugar a sus compañeros buscando evitar la llegada de sus rivales.  

Sobre el final, el conjunto del Tuca Ferreti tuvo una posibilidad para empatar el juego en una chilena fallida de Gignac.

Antes, el Bayern Múnich había tenido con Kimmich y con Choupo-Moting, acciones claras para ampliar la ventaja, pero por errores en la definición no pudieron hacerlo.

Finalmente, el duelo se cerró con el 1 a 0 a favor del cuadro alemán comandado por Hansi Flick, el DT germano que logró ganar cinco trofeos al hilo y ya lleva media docena de títulos desde su asunción, habiendo perdido solo cinco partidos. 

Esta es la segunda vez que el Bayern gana el Mundial de Clubes, luego de que en el 2013 se convirtiera en el primer cuadro alemán en ser campeón mundial tras superar al Raja Casablanca de Marruecos en la final. 

El francés Gignac recibió el balón de plata por su actuación en el certamen, mientras que Lewandowski, elegido como el mejor del mundo en 2020, se quedó con el de oro por su performance en el certamen.

El técnico alemán tiene más trofeos que partidos perdidos. 

Antes de la gran final, el Al-Alhy de Egipto venció por penales al Palmeiras, tras igualar 0-0, y se quedó con el tercer puesto.