El pasado domingo, una de las dos pistas más grandes de Buenos Aires, Alpina Skate, cerró sus puertas después de 34 años. "El hielo se ha derretido y no vamos a poder volver a ofrecértelo. Hicimos todo lo posible con el #noalcierredepistas. Sólo podemos darte la posibilidad de una última visita y despedida a este lugar tan especial", escribieron desde las redes sociales de la pista.

En el marco de esa convocatoria, cientos de personas se acercaron a la pista ubicada en Avenida Rivadavia 7431, dejaron carteles y se llevaron en un frasco un puñado de arena de la base de la pista de hielo que durante años sirvió para mantener las bajas temperaturas.



Según informó el diario Clarín, el combo de seis meses de pérdidas y la pandemia fue lo que desencadenó el cierre total del icónico lugar del barrio de Flores.

Desde el mes pasado, bajo la consigna #noalcierredepistas, patinadores profesionales, profesores y profesoras, clubes y alumnos iniciaron una campaña para evitar el cierre de las pistas.