El pasado 11 de enero, durante la disputa de la fase previa en Doha, Qatar, se oficializó el positivo de Francisco Cerúndolo. Era el segundo argentino que se contagiaba después de Juan Pablo Ficovich, que no tuvo opción de saltar a jugar un solo partido en el Australian Open. Por esta razón, el rosarino Renzo Olivo fue considerado como contacto estrecho lo que lo llevó a tener que aislarse.
En diálogo con De 12 a 14 (el Tres), Olivo dijo que tuvo solo dolor de garganta y hace dos días recuperó el olfato. Además, explicó: “Me testearon esta mañana y estoy esperando el resultado. Llevo más de tres semanas aislado”.
Todo comenzó con una fotografía que trascendió, en la que se veía a Cerúndolo comiendo en el hotel junto a la mayoría de la llamada Armada argentina. Además de Olivo estaban Guido Andreozzi, Facundo Mena, Andrea Collarini y Facundo Bagnis.
Es por esto, que al dar positivo Cerúndulo, a Andreozzi y Olivo se les consideró contacto directo por lo que tuvieron que seguir los protocolos y aislarse 10 días. Podían salir a entrenar siempre que dieran negativa en los test PCR de los días 1, 3 y 7.
El jugador afirmó que fue hisopado más de tres veces antes de dar positivo y contó cómo se enteró de la noticia. “ Voy a jugar el lunes y me sacan de la cancha, me dicen que me tenía que aislar me llevan con un transporte aparte, sin contacto con los demás jugadores y a hí fue cuando arrancó mi aislamiento de una semana. Y di positivo una semana después”, detalló.
El tenista rosarino contó que tenía que “una seguidilla de torneos en Turquía, pero con el alta me vuelvo a casa para entrenar para una gira por Sudamérica”.
