Rosario Central partirá este martes rumbo a su ilusión copera: este miércoles desde las 21.30 jugará con Huachipato de Chile por la cuarta fecha del grupo A, que por ahora lideran los chilenos con 8 puntos sobre los 7 del Canalla. Será en cancha de Banfield.
La buena noticia es que los tests RT-PCR que se realizaron como parte del protocolo sanitario Covid 19 de Conmebol a todos los integrantes del plantel profesional arrojaron resultados negativos, por lo que el Kily González tendrá a todos sus futbolistas a disposición.
En base a lo que probó en las últimas prácticas, el entrenador tiene en mente mandar a la cancha a los mismos once que vienen de ganarle claramente a San Lorenzo, donde se vio quizás lo mejor del equipo en toda la era Kily.
Los once que se perfilan: Jorge Broun; Damián Martínez, Facundo Almada, Gastón Ávila, Lautaro Blanco; Diego Zabala, Emmanuel Ojeda, Emiliano Vecchio, Luciano Ferreyra; Lucas Gamba, Marco Ruben.
El pleito con los trasandinos es clave porque si gana, el equipo de Kily González llegará a la última jornada puntero y dependiendo de sí mismo en el cotejo final ante 12 de Octubre para acceder a la única plaza que entrega cada zona. En cambio, si pierde, automáticamente quedará eliminado.
El cambio de escenario es por cuestiones de seguridad: se jugará en el estadio de Banfield (y no en el de San Lorenzo, como estaba previsto) porque tanto Vélez como River jugarán en Capital Federal, por Copa Libertadores, y la seguridad de CABA no puede garantizar los tres partidos el mismo día.
El Fortín chocará con Unión La Calera en Liniers desde las 19 y a continuación el Millonario recibirá a Independiente Santa Fe desde las 21 en Núñez. Por eso, para evitar la superposición de encuentros en los que se demanda la presencia de efectivos policiales, es que podría modificarse día, horario y hasta la cancha.
Vale recordar también que el cotejo se mudó de Rosario a Buenos Aires por la imposibilidad de que la delegación chilena aterrice en el aeropuerto de Rosario debido a que es un vuelo internacional y la terminal aérea local sólo está habilitada para arribos de cabotaje. Además, los chilenos no quisieron cambiar de avión para no romper la burbuja sanitaria, algo que exige la Conmebol.
